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Karim Benzema cumple el sueño de su vida al ganar el Balón de Oro 2022

En la hermosa mansión de Karim Benzema en Ciudalcampo, una exclusiva comunidad en las afueras de Madrid, había un espacio reservado para el Balón de Oro en la vitrina de trofeos. Durante años, el francés deseó exponer allí el trofeo de sus sueños, junto a todas las Champions Leagues y el resto de sus premios y medallas.

Y en la ceremonia del lunes por la noche, el sueño de toda una vida y su mayor logro finalmente se cumplió. Incluso cuando atravesó malos momentos, cuando las cosas no iban bien en Real Madrid, cuando no era elegido por Didier Deschamps para la selección de Francia e incluso cuando se hacía mayor, Benzema, coronado oficialmente como el mejor jugador del mundo, nunca dejó de trabajar, de creer o de soñar con ganar ese ilustre premio.

"Éste es el Balón de Oro del pueblo", dijo durante la ceremonia del lunes por la noche en el Teatro del Chatelet de París. No lo dijo en un sentido político, sino que lo consideró un ejemplo para todos los que, como él, tienen sueños y ambiciones de cualquier tipo. Personas que, como él, partieron desde abajo y sin nada, para seguir adelante y llegar al pináculo de su profesión. Personas que, como él, fueron descartadas y volvieron a levantarse. Personas que, como él, tienen talento y no se rinden, trabajando duro además de aprovechar al máximo sus dones. Benzema es una voz y un modelo en este sentido.

"Karim es fútbol", dijo Carlo Ancelotti el lunes por la noche. El entrenador de Real Madrid también tiene razón, porque el delantero francés posiblemente sea todo lo que uno ama del deporte: elegancia y clase, altruismo e inteligencia, talento y liderazgo. Es el delantero más completo de su generación, un jugador capaz de hacer milagros, como vimos la temporada pasada en la Champions League, en la que marcó 15 goles para llevar a los merengues a otro triunfo europeo, su quinto título de CL desde que se incorporó al club procedente de Lyon antes de la temporada 2009-10.

Zinedine Zidane, quien es como un hermano mayor de Benzema y era la persona perfecta para entregarle el trofeo, agregó algo aún más contundente que Ancelotti: "Si no puedes apreciar la grandeza de Benzema, entonces no entiendes el fútbol".

El Balón de Oro otorgado a Karim the Dream (así lo llaman) es un reconocimiento a una larga carrera en la que ha jugado con un diferente estilo de fútbol, uno con elegancia, atención, creatividad e inteligencia. Los futbolistas como él han sido raros a lo largo de la historia de este juego, porque son capaces de ver las cosas de manera diferente. A los 34 años (cumplirá 35 a finales de diciembre), es el ganador de un Balón de Oro con más edad desde que Stanley Matthews lo ganó en 1956, una leyenda de una era pasada. Es el primer francés en ganarlo desde Zidane en 1998. Estuvo cerca el año pasado, pero después de la temporada más importante de su carrera, esta vez no hubo dudas.

Después de que su triunfo fue anunciado, le pidió a su madre, Malika, que lo acompañara al escenario porque quería compartir ese momento con ella. Su madre siempre creyó en él, desde que era un niño obsesionado con el fútbol en Bron, cerca de Lyon. Su hijo de 5 años, Ibrahim (también tiene una hija, Melia, de 8 años) también estaba allí. Él está creciendo de una manera muy diferente a la de su padre, debido a la fama de Karim, pero con los mismos valores. Los Benzema son una familia grande y unida: las lecciones más importantes han sido enseñarles a sus hijos a respetar a los demás, trabajar duro y ser leales. Ahora Karim está pasando esas enseñanzas a la siguiente generación.

Por supuesto, Benzema ha cometido errores a lo largo de su carrera, incluyendo la saga que involucró a su ex compañero, Mathieu Valbuena, que se resolvió en junio. De no haber sido así, quizá hubiese ganado este Balón de Oro antes, o quizá no. Lo que sí es indudable es que ha aprendido de esos errores para convertirse en un mejor jugador y una mejor persona.

El martes por la mañana, apenas unas horas antes de la ceremonia, KB9 se encontraba en las instalaciones de práctica de Valdebebas a fin de prepararse para el partido de visitantes contra Elche el miércoles por la noche. ¿Festejó después de ser coronado como el mejor jugador del mundo? Por supuesto que no. ¿Tomó un poco de champagne para celebrar semejante logro? No, sólo tomó agua.

Cuando Karim Djaziri, su agente desde hace mucho tiempo, le preguntó a un Benzema de 15 años, mientras aún jugaba con el equipo Sub-17 de Lyon cuál era su sueño, el delantero le respondió: "quiero comprarle a mi madre una casa con una chimenea, quiero jugar con Real Madrid y quiero ganar el Balón de Oro". Dieciocho años después, todos esos sueños se han hecho realidad.