El aniversario de la consagración de Argentina en la Copa del Mundo de Qatar 2022 abrió la puerta de los recuerdos y los jugadores de la Selección conversaron con Sebastián Vignolo para el ciclo "Campeones, un año después", el especial exclusivo de Star+. Allí, Alexis Mac Allister detalló una situación especial del festejo en el estadio Lusail.
Tras la dramática final que Argentina le ganó a Francia por penales tras un extraordinario empate 3-3, llegó el momento más esperado por todos los jugadores: levantar la copa. Sin embargo, Mac Allister siente que el tiempo que pudo disfrutar con el trofeo fue escaso. "Lamentablemente hoy me arrepiento de que en ese momento quizás no tuve la Copa tanto en mis manos, pero había muchas personas que estaban ahí y querían tenerla".
Y agregó un deseo para el futuro: "Ojalá que en otro momento pueda tener la posibilidad de tocar la verdadera otra vez".
El actual jugador de Liverpool detalló qué representa haber alcanzado la gloria máxima: "Para nosotros formar parte de una estrella de la camiseta es imponente".
El recuerdo de la final ante Francia
En el partido del 18 de diciembre, Alexis Mac Allister dio la asistencia para Di María en el segundo tanto de la Selección. Fue una de las figuras del encuentro y dejó la cancha a los 116 minutos. Mientras salía, llegó el penal para Francia que Mbappé transformó en el 3-3: "Yo estaba saludando a alguien que no me acuerdo quién era, de espaldas a la jugada y alguien grita: 'No'. Entonces, ya me di cuenta que no era algo bueno, y cuando me di vuelta era el penal para ellos".
Pero segundos antes de la serie por penales, hubo una atajada histórica de Emiliano Martínez a Kolo Muani: "Yo estaba en el banco y creo que fui uno de los pocos que reaccionó a la atajada porque estaban todos como en shock, nadie lo podía creer y aparte, ahí se vino la contra rápido que después cabeceó Lautaro y fue un momento intenso".
Mac Allister vio los penales abrazado a Julián Álvarez y Gerónimo Rulli: "En el último penal le pregunté a Gero y me dijo que sí, que si metíamos éramos campeones, así que había que prepararse para correr", pero Mac Allister no corrió: "Me quedé parado. Empecé a caminar. Miré hacia atrás del banco donde estaba mi familia. Fue lo primero que hice, y después crucé toda la cancha caminando, me crucé al referí, le di la mano. Crucé al arquero, obviamente lo felicité y seguí caminando hasta que llegué al lugar donde estaban todos mis compañeros ahí festejando".