Thiago Alcántara, desplazado del primer plano en la selección española tras el cambio de entrenador, ocupa uno principal en el mercado de fichajes, siendo su nombre relacionado tanto con un Barça que se plantea la opción de recuperarle cinco años después de su marcha al Bayern como con el Real Madrid, presentándose ahí a Julen Lopetegui como su gran valedor para incorporarle a la plantilla merengue.
“Solo pienso en el Mundial” proclamó el futbolista, antes de la partida de la selección hacia tierras rusas, en Villarreal, y cuando su participación como titular en el amistoso contra Suiza daba a pensar en un protagonismo que después desapareció… Pero que con el paso de los días le ha devuelto al escenario convirtiéndole en el personaje que enfrentaría a los dos gigantes de la Liga.
Alrededor del Camp Nou su nombre se valora hace meses. Ya en 2017 el Barça se planteó recuperarle pensando en un futuro sin Iniesta, lo que ahora ya es presente, y Roberto Fernández, entonces secretario técnico azulgrana, estudió personalmente la opción de un fichaje que desde Múnich el Bayern rechazó.
La situación en Alemania, sin embargo, ha cambiado. Si Thiago era intocable en la era de Carlo Ancelotti, el club, atendiendo a los planes del nuevo entrenador Niko Kovac, está ahora mucho más dispuesto a traspasarle y aunque de entrada su venta se calcula alrededor de los 70 millones de euros esa cifra descendería, principalmente por el interés bávaro en sentenciar su marcha.
PADRINO
Decidida la incorporación inmediata de Arthur Melo, el área deportiva del Barcelona considera la adaptación del brasileño al fútbol europeo puede no ser inmediata y que ante ello sería preciso el fichaje de un futbolista que, sustituyendo a Iniesta, tuviera la capacidad inmediata de entrar en la dinámica del equipo.
Y ahí, se especula, nadie mejor que Thiago, un jugador que entiende a la perfección la personalidad del juego azulgrana… Pero cuya figura, de sopetón, se relaciona con el máximo rival y con Lopetegui como gran aliado.
El nuevo entrenador del Real Madrid mantiene, se vio en la selección, una confianza absoluta en el futbolista y su fichaje por el club merengue, más allá de la posible salida de Kovacic, se entendería factible, también, desde un punto de vista financiero.
Y es que ahí entraría la figura de James Rodríguez, cedido por el Madrid al Bayern hasta junio de 2019 y que podría entrar en la operación, quedando en propiedad para el club alemán a cambio del trasvase de un Thiago que, por si fuera poco, añadiría con su fichaje morbo a la Liga por su pasado en el Barça.