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¿Qué le pasa al Manchester United, Bayern Munich, Manchester City y Liverpool que parecen vulnerables?

Aston Villa 7, Liverpool 2. Leicester City 5, Manchester City 2. Tottenham Hotspur 6, Manchester United 1. Hoffenheim 4, Bayern Munich 1.

Las primeras semanas de la temporada 2020-21 de fútbol europeo han arrojado una buena cuota de resultados para reacciones como, "Espera... ¿QUÉ?"

Tras el cierre de la ventana de pases y con el fútbol de clubes en pausa por la ventana internacional, es una buena oportunidad para reflexionar sobre algunos de los pesos pesados que han sufrido golpes y diagnosticar quiénes podrían tener verdaderos problemas y quiénes no pasaron más que un susto.

MANCHESTER UNITED

Dilo conmigo: Manchester United, 16º. Los Diablos Rojos de Ole Gunnar Solskjaer tienen suerte de tener tres puntos después de tres partidos: intercalaron derrotas ante Crystal Palace (3-1) y Spurs con un descabellado triunfo por 3-2 sobre Brighton gracias a un penal ganador en el décimo minuto del tiempo añadido al final del encuentro. Si bien la mayoría de los equipos en este artículo tienen un resultado particularmente malo, United aún no ha producido uno particularmente alentador en la liga.

United fue un equipo difícil de leer al final de la temporada pasada. La delantera recibió un claro impulso con la llegada de Bruno Fernandes en enero, pero su producción también fue artificialmente alta debido a una cantidad insosteniblemente elevada de penales ganados, y gracias al nivel de Mason Greenwood en las definiciones, que probablemente era demasiado bueno para continuar. Mientras tanto, aunque la defensa era considerada como el punto débil por muchos fans y analistas, United terminó cuarto en la liga en remates permitidos por posesión, tercero en xG permitidos por remate y tercero en goles cedidos.

Bastante bien.

Existían algunos factores de regresión que obviamente iban a complicar la carrera de United por el título --los penales, el retorno de Greenwood a la media, ventajas en las jugadas a pelota parada y porcentajes de atajadas que iban a ser difíciles de mantener-- pero la formación parecía estable y los roles estaban bien definidos.

Sin embargo, United es un equipo mucho más fácil de leer ahora: apesta.

La delantera ha retrocedido un poco, como se anticipaba, pero la defensa se ha derrumbado por completo. Pasaron de permitir remates mayormente mediocres a ceder excelentes (0.16 xG por disparo, 17º en la liga) y, más importante aún, sus rivales están pasando de rematar poco a hacerlo todo el tiempo (0.21 remates por posesión, el número más alto de la liga, por lejos).

El año pasado cedieron un promedio de 2.6 remates por partido con un valor de al menos 0.1 xG. Este año, están permitiendo 5.7. Peor aún, estos remates de alto valor están llegando de muchas maneras. Todos los adversarios de United han ganado penales hasta ahora, lo cual es insostenible y una señal de desprolijidad. Pero también hemos visto a sus tres oponentes crear peligro en transición. Los Spurs marcaron dos veces en situaciones de transición, mientras que Brighton pegó en el travesaño en un contraataque rápido. (Con el trabajo que hicieron contra Brighton, los palos han sido los mejores defensores de United en lo que va de la temporada).

Sin embargo, el acontecimiento más preocupante es la facilidad con la que sus adversarios están generando peligro en situaciones de juego abierto. Aquí era donde United se destacaba el año pasado, pero tanto Palace como Spurs simplemente marcaron estirando la defensa y metiendo buenos centros, y sus tres adversarios crearon buenas ocasiones de gol con precisos pases diagonales, sacando provecho de la lentitud de la defensa.

¿Quién tiene la culpa de esta repentina mala defensa? Básicamente todos.

El central Harry Maguire fue visto por última vez tirando accidentalmente a su propio compañero al piso en la desventurada secuencia previa al primer gol de los Spurs el domingo. Ha estado lento y tuvo suerte de no agrandar el total de penales cedidos por United con una serie de entradas a destiempo. El lateral izquierdo Luke Shaw fue visto por última vez recibiendo una tarjeta amarilla al final del partido contra los Spurs por la entrada más flagrante, táctica y con actitud de "este partido está terminado, y estoy cansado de perseguir a este tipo" que jamás verás. Los mediocampistas defensivos Nemanja Matic y Fred no hicieron prácticamente nada para evitar que los jugadores contrarios se establecieran en el primer tercio de la cancha, y Paul Pogba, bueno... buena suerte para encontrar una estadística individual que marque otra cosa que una enorme regresión de este jugador.


Paul Pogba en 2020-21:

Intentos de pase: bajó de 77 (cada 90) en la liga el año pasado a 55
Toques en el tercio intermedio: bajó de 56 (cada 90) a 45
Porcentaje de pases al tercio intermedio: bajó de 88% a 79%
Porcentaje de pases al tercio ofensivo: bajó de 78% a 73%
Ocasiones creadas: bajó de 2.2 cada 90 a 0.0


Los únicos incrementos en las estadísticas de Pogba se vieron en entradas intentadas (subió de 0.6 cada 90 a 1.6) y faltas cometidas (de 0.8 a 1.6). No son buenos incrementos. Si tus ojos te dicen que parece un poco más lento de todas las maneras posibles, hay muchos datos que lo respaldan.

¿Esto quiere decir que Pogba, Maguire, Shaw, Matic, Fred y compañía de pronto son malos y están terminados? Probablemente no. Estamos en el comienzo de lo que será una de las temporadas más exigentes en términos de volumen y congestión de partidos, y la temporada baja prácticamente duró una hora y media. (Bueno, como un mes para United.) Muchas estrellas arrancaron la campaña arrastrando los pies, y los niveles de juego simplemente van a ser más volátiles en este momento.

Todas las estrellas que han tenido dificultades en United probablemente se recuperarán en algún punto, y la incorporación del lateral Alex Telles de Porto les brinda otra oportunidad para encontrarle la vuelta atrás. ¿Pero cuándo comenzará esta progresión a la media? ¿Cuando vuelva el fútbol luego de la ventana internacional? ¿Más tarde? ¿Solskjaer será despedido antes de que las cosas mejoren?

Y, quizá más importante aún, ¿cuántos puntos perderá el equipo antes de que comience el rebote?

Ya perdieron seis en tres partidos, y, en promedio, sólo puedes perder unos 40-45 puntos en 38 partidos si pretendes clasificar a la Champions League. Obviamente, todas las metas siguen sobre la mesa este año, pero no falta tanto para que algunas empiecen a parecer poco realistas e imposibles.

Nivel de preocupación: 8 de 10. Esto no es una casualidad estadística --United está 19º en la liga en diferencial xG-- y no hay una solución táctica rápida para "casi todos están jugando mal".

MANCHESTER CITY

Debido a su mala fortuna de nivel de elite contra los Spurs, United debería ser el titular de esta nota. Pero sus contrincantes en el derby, Manchester City, tenían lo que parecían ser sueños de cara al título más realistas este año y ya han perdido cinco puntos en tres partidos. Perdieron apenas 14 puntos en toda la temporada durante su camino al título en 2017-18.

El quinto equipo de Pep Guardiola en City - es oficialmente el período más largo en el que ha estado en un club - ha proporcionado tres impresiones diferentes en tres partidos.

-- Fueron dominantes en la posición y físicos en una victoria por 3-0 ante un equipo de los Wolves que había barrido con ellos la temporada pasada.

-- Ellos monopolizaron la pelota (72% de posesión) contra Leicester City, pero fueron despedazados en la transición, concediendo tres penales en una derrota por 5-2.

-- Justificablemente, recelosos del juego de transición desplegado por el viejo mentor de Guardiola, Marcelo Bielsa y Leeds United, City jugó sin la pelota mucho más de lo usual, con una posesión de apenas el 49% del tiempo y completando menos pases (319 a 356), una rareza extrema en la era de Guardiola. Lideraron durante 42 minutos, pero se conformaron con un empate 1-1.

En promedio, City continuó para convertirse en una versión exagerada de ellos mismos.

Están presionando la pelota mejor que nunca, con ocho posesiones más que su rival por partido en el tercio atacante y con menos pases permitidos por posesión (PPDA), de 10.1 la temporada pasada a 9.9. Están definiendo una porción más alta de posesiones en el tercio atacante en comparación con el año pasado, y están permitiendo que los rivales definan menos allí. Pero la calidad de sus disparos ha bajado considerablemente - su promedio por disparos de 0.10 xG es el cuarto peor en la liga (¿tal vez el efecto de haber perdido a David Silva?). Además, la mayor debilidad de la campaña pasada, la calidad de tiros oponente, se ha acentuado: han permitido la peor marca de la liga con 0.14 xG por tiro la temporada pasada, y en este momento están en 0.24 en tres partidos.

Una vez más, se viene un regreso a la media, así como también se vienen los refuerzos -- City fichó al defensor central de AFC Bournemouth, Nathan Ake en agosto, y sumó al de Benfica, Rúben Dias, al final de la ventana de pases. En algún punto, Guardiola encontrará la combinación adecuada de las partes que ha estado buscando desde hace un tiempo. Pero ante una Premier League que ha elevado su juego colectivo en la transición de manera considerable, Guardiola parecería estar atravesando una crisis de identidad, jugueteando con una mayor cantidad de estrategias de lo normal sin poder quedarse con una que solucione todos los problemas que han aquejado a los Cityzens el año pasado.

Nivel de preocupación: 6. Una vez sola City se ha visto realmente mal, pero el partido del 17 de octubre contra Arsenal podría hacer que este 6 se convierta rápidamente en un 7 o un 8.

BAYERN MUNICH

Ahora pasemos a los equipos que están en menor peligro, o lo que sea que se pueda considerar un "peligro" después de tres a cuatro partidos en la temporada.

La derrota de Bayern por 4-1 ante Hoffenheim hace una semana y media fue estremecedora, pero también es cierto que ha sido su primera derrota desde el pasado diciembre. Y llegó en un momento en el que el equipo estaba rotando a sus titulares entre las victorias de mediados de semana ante Sevilla (Supercopa de la UEFA) y Borussia Dortmund (Supercopa de Alemania). De todas maneras, su defensa ha sido un tema de preocupación al igual que lo ha sido para muchos equipos que se inclinan por la posesión a lo largo de toda Europa.

Después de la derrota ante Hoffenheim, necesitaron tres goles para superar a Dortmund y cuatro para ganarle a Hertha Berlin en casa. Han permitido 10 goles en tres partidos, lo que se puede decir que sería una señal de alerta. Los tres equipos pudieron forzar pérdidas de balones en áreas peligrosas y marcar goles en la transición - algo que casi nunca sucedió durante la larga racha ganadora de Bayern - y tanto Hoffenheim como Hertha también marcaron en jugadas de pelota parada.

La organización de los campeones ha sido impecable la temporada pasada, pero se están vislumbrado algunas grietas. Si miras las últimas actividades de Bayern en el mercado de pases - sumaron al defensor lateral derecho de Marsella, Bouna Sarr; al mediocampista de Espanyol, Marc Roca; y al delantero de PSG, Eric Maxim Choupo-Moting; además del hombre de Juve, Douglas Costa (en su momento empleado de Bayern) y el jugador de Benfica, Tiago Dantas, en calidad de préstamo - al parecer, tienen intenciones de emplear una amplia rotación durante todo el año. Eso tiene sentido con la cantidad de partidos que tienen, pero quizá no ayude a sus problemas de comunicación.

Nivel de preocupación: 3. Uno da por sentado que Bayern hará jugar a su equipo A en los momentos clave y, después del año pasado, cuando Bayern estaba séptimo tras 14 partidos y logró una remontada para ganar la liga, es difícil preocuparse de verdad luego de una sola derrota.

LIVERPOOL

La temporada arrancó muy bien para los campeones reinantes de la Premier League. Después de una victoria 4-3 ante Leeds en el primer partido, superaron a Chelsea y Arsenal por dos goles en cada oportunidad, asegurándose seis puntos de dos potenciales retadores al título.

Luego, la semana pasada, las cosas se complicaron. El arquero, Alisson Becker, sufrió una lesión en el hombro, y los extremos Sadio Mané y Xherdan Shaqiri junto con la nueva adquisición, Thiago, dieron positivo de coronavirus. Los Reds se retiraron de la Copa de la Liga Inglesa con una derrota ante Arsenal, y luego fueron destrozados por Aston Villa 7-2. La calidad de sus tiros se debilitó un poco la semana pasada, su volumen de disparos sufrió una pequeña regresión, y luego de que un error del arquero de reserva Adrián dio lugar al primer gol de Villa dentro de los primeros cinco minutos, todo se desmoronó defensivamente para los campeones.

Asumiendo que los que dieron positivo por COVID-19 regresarán con buenos estados físicos y sin complicaciones - una posibilidad razonable pero no segura al 100% -- no parece haber nada mal en la conformación del escuadrón. La defensa ha estado bien en dos de cuatro partidos de liga (y los Reds no tuvieron suerte ante Leeds desde una perspectiva de xG), el extremo Mohamed Salah ha sido de otro mundo, y las incorporaciones de Thiago, el extremo de los Wolves, Diogo Jota, y el zaguero de Olympiakos, Kostas Tsimikas, debería establecer con firmeza la profundidad y las necesidades en cuanto al armado de jugadas en las áreas necesarias.

Nivel de preocupación: 3. Perder un partido de liga no es el fin del mundo, pero convierte a su batalla del 17 de octubre ante Everton, en su derby más importante en años, realmente importante.