La regla de menores de la Liga MX ha permitido el surgimiento de esta generación que llegó ya a los cuartos de final del Mundial Sub-20
El nombre de Gilberto Mora, Iker Fimbres, Hugo Camberos no sonarían en la Liga MX sin la regla de menores, los hijos de esa regulación que aprovechó la Selección Mexicana Sub-20.
Después de una eliminación prematura en la Copa América 2024, los dirigentes de la Federación Mexicana de Futbol impusieron el regreso de la regla de menores en el balompié mexicano.
Como una medida para darle espacio a los futbolistas jóvenes mexicanos y con la necesidad de encontrar nuevo talento que nutra a las selecciones nacionales mexicanas.
En un corto plazo, la regla ha funcionado. La Selección Mexicana Sub-20 llegó a los cuartos de final de la Copa del Mundo Sub-20, por primera vez en los últimos ocho años. Una de las principales características del equipo de Eduardo Arce, es que 19 de los 21 convocados para ese Mundial tienen experiencia en la Primera División.
De los 21 convocados por Eduardo Arce para el Mundial Sub-20, siete debutaron gracias a la regla de menores, que obliga a poner a jugar a futbolistas menores de 22 años al menos mil 70 minutos por torneo.
Entre los que lograron ver la luz de la Primera División gracias a esa regulación están Gilberto Mora, Pablo Lara, José Pachuca, Diego Ochoa, Iker Fimbres, Hugo Camberos y Oswaldo Virgen.
El resto de los jugadores convocados a la Selección Mexicana Sub-20 vieron que aumentó su regularidad en la Liga MX, gracias al torneo. Al grado que México llegó con un equipo que suma 21 mil 999 minutos en Primera División, casi 10 veces más que el equipo mexicano que jugó el Mundial Sub-20 del 2019 (dos mil 400 minutos) y que quedó eliminado en la fase de grupos.
La regla de menores da los primeros réditos en la Copa del Mundo Sub-20 con México llegando a los cuartos de final, y pese a la eliminación ante Argentina, el cuadro de Eduardo Arce promete para el futuro.