Y Liverpool lo hizo posible. Ganó su partido ante Peñarol en el Campeón del Siglo y entreveró todo de cara al fin de semana clásico. Ahora el carbonero mantiene la punta en la tabla anual, pero perdió la del Clausura, que ahora encabeza Liverpool.
La victoria negriazul fue incuestionable. De principio a fin fue superior y si el resultado no fue mayor se debió a la enorme tarea de De Amores. Liverpool confirmó lo bueno que viene haciendo en busca de coronar todo con un campeonato uruguayo. El trabajo de Jorge Bava ha sido impecable y los jugadores lo llevan adelante a la perfección.
Para Peñarol una alerta muy grande porque venía jugando muy mal, pero ganaba. Esta vez dió con un equipo que no lo perdonó y sus problemas defensivos, que son enormes, no los pudo disimular.
Peñarol no remató al arco. No tuvo una situación de gol neta mientras que Liverpool tuvo varias. Si la diferencia era más abultada a nadie podía extrañar.
Está claro que Peñarol sigue dependiendo de sí mismo, aunque se juega gran parte de ello el próximo sábado en el clásico del Gran Parque Central.
Pero si el aurinegro busca seguir con la punta de la anual y hundir más aún a Nacional, el tricolor se juega el año deportivo. Le queda el clásico y la clasificación a la Libertadores. Es cierto que aprontó bien con la goleada ante River Plate. Habrá que ver si los de Recoba repiten lo bueno que hicieron el sábado y si Peñarol levanta su producción. La última vez en su cancha Nacional ganó con la vuelta de Suárez que anotó un golazo.
Por otra parte estará sobrevolando el Gran Parque Central el ambiente de elecciones que se juegan en Peñarol. Nadie puede dudar que no sería la primera vez que un resultado clásico y un campeonato sean determinantes para el resultado electoral..
Fíjense todo lo que estará en juego el sábado. Y tanto Liverpool como Defensor Sporting, el otro en la pelea, mirarán de reojo. Liverpool está cerca, tiene que rematar y dar el golpe. Creérsela y demostrar que es el equipo que juega mejor al fútbol en este país.