Jonatan Álvez confirmó que en este 2025 jugará en la Segunda División del fútbol uruguayo y destacó que le gustaría finalizar su carrera en Danubio o en Barcelona de Guayaquil.
El delantero de 36 años fue anunciado como nuevo jugador de Cerrito, y expresó este jueves en 100% Deporte (Radio Sport 890): “Estoy contento. Estaba jugando en Ecuador y como el torneo empieza después de mitad de año, decidí quedarme en Uruguay y darle una mano a Cerrito. Estoy con muchas ganas y voy a tratar de ponerme a tono lo más rápido posible”.
“Me convenció el Chuky (el entrenador Marcelo Suárez), en su momento fue ayudante de Leo Ramos y somos casi familia. Nunca perdimos el contacto y siempre hablamos bastante, me dijo que tenía un buen proyecto en Cerrito y me gustó su idea”, contó Álvez, quien a nivel profesional ha jugado en Torque, Danubio, Vitória Guimarães de Portugal, Liga de Quito, Barcelona de Guayaquil, Junior de Barranquilla, Inter de Porto Alegre, Atlético Nacional de Medellín, Unión de Santa Fe y Naranja Mekánica de Ecuador.
“Me vine a Cerrito porque ya quiero estar un poco cerca de mi familia y disfrutar de mi abuela que ya está un poco grande. En Ecuador, quedamos eliminados el año pasado a fines de noviembre, así que tengo que hacer una buena pretemporada y ponerme a tono lo más rápido posible. Trataré de dar lo mejor cuando me toque la oportunidad”, valoró.
Álvez había jugado por última vez en el fútbol uruguayo en Danubio (equipo con el que se había consagrado campeón uruguayo en la temporada 2013/14) en 2023, donde no tuvo mucha continuidad.
“Ahora decidí tomar la mejor decisión para seguir en rodaje, por mi familia y por mí, y trataré de disfrutar del fútbol uruguayo. La última vez no lo disfruté como lo intentaré hacer ahora. Lo primero es ponerme a tono, trato de pensar a Cerrito y hacer una buena pretemporada. No he pensado en retirarme todavía; cuando me toque, tengo ganas de hacerlo en Danubio o en Barcelona, donde me identifico por lo que hice”, dijo respecto a su futuro.
Y señaló sobre la posibilidad que nunca se concretó de jugar en Peñarol: “Hoy en día, ya estoy un poco grande. Tenía el sueño de chico porque toda mi familia es de Peñarol, pero hoy soy hincha de Danubio y Barcelona, equipos donde hice mi historia. Tampoco uno nunca tiene que descartar nada, uno nunca sabe las revanchas del fútbol ni sabe el destino. Cuando en su momento los grandes me ofrecieron para venir a Uruguay, opté por la mejor decisión de mi familia”.