Maximiliano Olivera, capitán de Peñarol, habló del cambio que hizo en su juego y que le ayudó a aumentar sus cifras goleadoras, de cómo esto se modifica según el esquema táctico que usa el equipo y también se refirió al mal momento que vive Wanderers.
En entrevista con el programa “Minuto 1” (Carve Deportiva), Olivera se refirió a su momento goleador, habiendo logrado en el triunfo ante Wanderers su séptimo tanto en la temporada entre todas las competiciones. “Cuando uno está en racha tiene que aprovechar lo que queda dentro del área. Tampoco es que me da por hacer mucha cosa, le pego y ya está”, comentó el lateral izquierdo.
El futbolista reconoció que sus incursiones al ataque suelen darse cuando Peñarol ataca por la banda derecha, mostrándose como una opción más en el área. “Trato de ver que, cuando la circulación está yendo por derecha, ya meterme en diagonal, estar al rebote ya que los extremos y volantes del rival también bajan. Cuando veo que la pelota va al centro, me meto al área o depende dónde estén mis compañeros. Contra Wanderers yo quedé por dentro y Diego García fue al borde del área, siempre hablamos con él para alternar esas posiciones, pero casi siempre llego cuando desbordamos por derecha”, explicó.
A su vez, dijo que esa decisión pasa más por él que por una indicación del entrenador. “Es más personal, era un tema de cambiar algo cuando las cosas no venían saliendo, empezar a hacer algo diferente. Me enfocaba más en lo defensivo, en cerrarme más cerca de los zagueros y no me estaba sintiendo cómodo, busqué hacer algo diferente. Siempre, entre bromas con Sebastián Cristóforo, mirábamos a Lucas Hernández cuando jugaba y yo estaba afuera y lo veía tirar muchas diagonales, jugar mucho por dentro, con la calidad que tiene. Tratando de cambiar ese estilo de juego más defensivo que yo tenía y meterme más en lo ofensivo, se me fue dando de encontrar esas pelotas en el área”, indicó Olivera.
El capitán aurinegro fue consultado sobre si le cambia mucho este aspecto de su juego si el equipo juega con extremos fijos o con un doble 9. “Me cambia más cuando jugamos con tres volantes y dos delanteros, que no tenemos extremos, porque lo tengo que hacer mucho más constante y más por afuera, como haría un extremo. Cuando juego con un extremo, por ejemplo, con Diego García me entiendo muy bien, siempre nos hablamos para ver quién va por fuera y quién por dentro, vamos variando entre nosotros y eso lo hace tener menos recorrido o moverse por diferentes lugares de la cancha. Cuando jugamos con tres volantes cambia porque tengo que ser más como un extremo y abrir más la cancha”, señaló.
Olivera está cuarto en la lista de goleadores de Peñarol en el año, y se refirió a cómo pudo revertir lo que parecía que iba a ser un año muy complicado a nivel personal. “Pintaba para un año feo, lo estaba pasando mal y a veces no encontraba una salida, o a los mensajes de apoyo de mi gente cercana les decía que sí sin creerlo. Con esto del rendimiento y los goles fui agarrando confianza, es lo que más valoro y estoy disfrutando. Al salir del Parque Viera contra Defensor, poder sentir el aplauso de la gente, para mí vale mucho más que los siete goles que hice”, expresó.
Olivera también se refirió al momento que vive Wanderers, equipo donde hizo las divisiones formativas y debutó en Primera División. “Duele mucho, los vengo siguiendo. Voy al Parque Viera cuando puedo, duele porque le tengo un cariño gigante al club. Estoy deseando e hinchando para que pueda conseguir puntos en estas fechas, se pueda mantener y el año que viene se verá que hay que cambiar muchas cosas para que no siga así”, comentó.
