OWINGS MILLS -- Los Baltimore Ravens apuestan a un coordinador ofensivo distinto y a un receptor de renombre para cambiar su fortuna en el 2014, pero el resultado está en el aire porque la ofensiva ha tenido sus altibajos en lo que va del campamento.
La mayor razón por la que los Ravens no consiguieron defender su título de Super Bowl del año previo y fracasaron en su intento de alcanzar los playoffs por primera vez en las seis campañas del entrenador en jefe John Harbaugh al frente del club, fue por la cuarta peor ofensivas de la liga. El mariscal de campo Joe Flacco tiró la segunda mayor cantidad de intercepciones en la liga, el corredor Ray Rice promedió su peor total como profesional con 3.1 yardas por acarreo, y los Ravens anotaron 20 puntos o menos en todas excepto una de las derrotas del equipo.
Flacco ha lucido inconsistente hasta el momento en el campamento, mientras que Rice parece haber recuperado su explosividad tras perder 15 libras.
La ofensiva de los Ravens tendrá una imagen distinta este año luego de haber sumado a Gary Kubiak como coordinador ofensivo y firmar al receptor abierto Steve Smith en la agencia libre. En el sistema de Kubiak, Flacco tendrá que deshacerse del ovoide más rápido, realizar pases más cortos, y correr más en pases rolados. El énfasis ha sido notorio en los ejercicios, mientras Flacco se intenta deshacer del ovoide en retrocesos de 3 y 5 pasos.
Cuánta mejoría pueda mostrar Flacco en el sistema de Kubiak probablemente determinará la mejoría general para los Ravens en la temporada.
"Lo que me gusta acerca de lo que está haciendo el coach Kubiak, es una ofensiva muy directa. Es muy clara", dijo Harbaugh. "Eso quizás ayude a que los jugadores la aprendan tan rápido como es posible. Pero sí, siempre hay detalles, y debes experimentar algunas cosas, a veces. Me gustaría pensar que seremos mejores dentro de ella dentro de un año que ahora, pero no podemos estar pensando de ese modo. Debemos lucir grandiosos en ella ahora porque vamos a estar disputando un partido de fútbol americano muy pronto. Sucede que es contra los Cincinnati Bengals, quienes ganaron nuestra división el año pasado, así que es lo que estamos viendo y para lo que nos debemos preparar".
Pero el mundo del fútbol americano no se ha enfocado en la nueva ofensiva de los Ravens. El centro de atención ha sido Rice, quien fuera suspendido dos encuentros por la NFL por su incidente de supuesta violencia doméstica.
Los Ravens desean volver a sus raíces de correr el ovoide nuevamente, y la clave es contar con un Rice a nivel. ¿Podrá Rice tener una campaña productiva después de un receso de temporada tan tumultuoso? Él ciertamente lo cree así.
"El campo de fútbol americano es mi refugio", dijo Rice. "Honestamente, sólo con venir acá y ser parte del programa de temporada baja, ponerme en forma, entrenar y hacer las cosas que siempre he estado haciendo sobre el emparrillado, me siento como el de siempre. Me ha dado cierta inspiración Me ha dado cierta inspiración salir allá, y no solamente salir sino jugar al fútbol americano. Me ha dado la inspiración para salir y tratar de ser el mejor jugador de fútbol americano que puedo ser".
TRES MOTIVOS PARA SENTIR OPTIMISMO
1. El historial de Gary Kubiak. Kubiak aporta un sistema probado y un currículo impresionante. Como entrenador en jefe de los Houston Texans, el equipo ranqueó en el Top-10 en ofensiva en seis de las últimas ocho campañas. Para poner eso en perspectiva, la ofensiva de los Ravens no ha ranqueado en el Top-10 desde 1997, cuando Flacco tenía 12 años de edad Del 2009 al 2012, los Texans ranquearon N° 7 en puntos anotados (23.2). A lo largo del mismo periodo, los Texans fueron uno de tres equipos en ranquear en el Top-10 por tierra y por aire (los New England Patriots y Philadelphia Eagles fueron los otros). Los jugadores han halagado a Kubiak durante el campamento por su postura franca, la que no permite muchas áreas grises.
2. Agresividad a la defensiva. Los problemas ofensivos de los Ravens en la temporada pasada desviaron la atención a las carencias defensivas. En la segunda mitad de la campaña, los Ravens consiguieron apenas 12 capturas en ocho encuentros. Solamente los Kansas City Chiefs, Dallas Cowboys y Cleveland Browns registraron menos. El estilo incansablemente agresivo había desaparecido. Con base a lo mostrado por los Ravens en el campamento hasta ahora, desean volver a una defensiva dominante. Baltimore ciertamente cuenta con el personal para perseguir al mariscal de campo con Terrell Suggs y Elvis Dumervil atacando desde las orillas. Esperen mayor número de cargas y más cobertura de presión de una defensiva de los Ravens que tiene la mirada en volver a ser una unidad del Top-5 en la NFL, y hasta ahora en el campamento, un rejuvenecido Suggs ha liderado la carga.
3. Mejoría de armas para el ataque aéreo. Flacco ha recibido fuertes críticas por su peor campaña en su carrera de seis temporadas de NFL, y con razón. Tomó malas decisiones que le costaron partidos a los Ravens. Simplemente, no hagamos caer toda la culpa sobre los hombros del ex JMV del Super Bowl. Para la Semana 2 del año pasado, su segundo mejor receptor era el novato no reclutado Marlon Brown y su mejor ala cerrada era Dallas Clark, quien ya se retiró. Este año, Flacco cuenta con dos nuevos receptores experimentados en Smith y el ala cerrada Owen Daniels. Pese a que Daniels no ha lucido explosivo en el campamento, Smith rápidamente ha desarrollado química con Flacco. No olviden al ala cerrada Dennis Pitta, quien se ha recuperado plenamente después de perderse 12 juegos la temporada pasada por una dislocación en la cadera. Podría tratarse del elenco de reparto más fuerte alrededor de Flacco como profesional.
TRES MOTIVOS PARA SENTIR PESIMISMO
1. Falta de profundidad en las esquinas. Los Ravens tienen a una de las mejores duplas de esquineros en la liga con Lardarius Webb y Jimmy Smith, ambos defensivos con calibre de Pro Bowl. El problema es que ninguno tiene un historial de mantenerse sano. Webb, quien ya se espera pierda dos partidos de temporada regular por una lesión de espalda, se ha roto dos ligamentos de rodilla en su carrea de cinco años en la NFL, y ha iniciado los 16 encuentros de la campaña solamente una vez. Smith se ha perdido nueve encuentros en sus tres años en la NFL. Después de que Aaron Ross sufriera una lesión en el tendón de Aquiles antes de que comenzara oficialmente el campamento, los Ravens se han quedado con reservas sin experiencia. Chykie Brown participó en el 3 por ciento de las jugadas defensivas el año pasado, Asa Jackson nunca ha participado en la temporada regular, y Tramain Jacobs y Deji Olatoye son novatos no reclutados. Se trata del punto débil de los Ravens. Brown ha tenido más problemas que cualquiera durante el campamento y Jackson también ha sufrido su cuota de dificultades.
2. El progreso de la línea ofensiva. No hay duda de que los Ravens tendrán una mejor línea que el año pasado. Para ser honesto, no podía haber sido peor. La línea abrió pocos huecos en el juego terrestre y permitió demasiada presión sobre Flacco. La mayor interrogante ofensiva es si la línea ha mejorado al punto en que los Ravens pueden ser efectivos. Después de casi una docena de prácticas en el campamento, la línea no ha proveído demasiadas respuestas definitivas. Los guardias Marshal Yanda y Kelechi Osemele han sido dominantes. Pero el tackle izquierdo Eugene Monroe ha sufrido en instancias, mientras que el tackle derecho Rick Wagner ha sido adecuado, apenas. El centro Jeremy Zuttah es atlético pero no va a ser considerado entre la mitad de arriba en su posición en la liga. Los Ravens sabrán más acerca de su línea ofensiva cuando arranque la pretemporada.
3. La edad de jugadores claves. Los Ravens son mucho más jóvenes que cuando conquistaron el Super Bowl hace dos temporadas. Habiendo dicho eso, los Ravens esperan que los veteranos se recuperen tras sus temporadas decepcionantes. Sugs, de 31 años de edad, no logró una captura en siete de sus últimos ocho encuentros del 2013. Steve Smith, de 35 años, atrapó su menor número de pases (64) desde el 2010. El tackle defensivo Haloti Ngata, de 30 años, no ha llegado a las 60 tacleadas en campañas consecutivas. El ala defensiva Chris Canty, 31, finalizó la temporada pasada con 30 tacleadas, la menor cantidad para una campaña completa en su carrera. Daniels, 31, se vio limitado a cinco encuentros la temporada pasada por una fractura en la pierna. Los Ravens necesitan obtener más que sólo liderazgo de sus jugadores de mayor edad. Mientras que Suggs y Smith están entre los que más han destacado en el campamento, Canty y Daniels no han lucido.