ASHBURN -- La purga de temporada baja de los Washington Redskins comenzó con su línea defensiva tras cortar este viernes al veterano Barry Cofield.
El movimiento se produce un día después que los Redskins firmaron al ala defensiva veterano Ricky Jean-Francois. Al cortar a Cofield, los Redskins se ahorrarán 4.12 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial. Su impacto en el tope salarial habría sido de 7.7 millones si se hubiese quedado en el equipo.
Cofield jugó cuatro años con Washington, principalmente como tackle nariz. No se perdió ningún partido con los Redskins hasta esta temporada, cuando lidió con un esguince en la parte alta del tobillo así como problemas en la ingle y abdomen que lo enviaron a la lista de reservas lesionados con designación para volver. Terminó jugando ocho partidos. Antes de la campaña anterior, Cofield sólo se había perdido un partido en ocho años.
Cofield jugó sus primeras cinco temporadas como tackle defensivo con los New York Giants. Se cambió a tackle nariz en el sistema 3-4 de los Redskins tras firmar con el equipo en el 2011, terminando su etapa en Washington con nueve capturas. En el 2013, registró 36 tacleadas y 2.5 capturas. Todavía existe la posibilidad que los Redskins lo recontraten más tarde, de acuerdo a una fuente. Sin embargo Cofield también está lidiando con una lesión no revelada.
Los Redskins también tienen que tomar una decisión con el ala defensiva veterano Stephen Bowen, quien impacta con 8.02 millones el tope salarial de esta temporada y ha luchado con lesiones de rodilla en los últimos años.