Las británicas Katie Boulter y Jodie Burrage disputarán este domingo la final del torneo WTA de Nottingham en un hecho histórico.
Por un lado, ambas en busca del primer título del circuito de sus respectivas carreras. Pero además, el partido del domingo será la primera final británica de la WTA en 46 años. El 28 de febrero de 1977, Sue Barker venció a Virginia Wade en San Francisco, Estados Unidos.
Instaladas más allá de las cien primeras del ranking femenino, Boulter y Burrage dispararon su protagonismo en este torneo sobre césped. Burrage, de 24 años y situada en el puesto N°131 de la clasificación mundial , ganó a su compatriota Heather Watson por 6-4 y 7-5, en dos horas de juego.
La londinense disputará la primera final de su carrera, al igual que Boulter, que venció a Alize Cornet: la francesa cayó contra Burrage por 7-5 y 7-5.
La jugadora de Leicester, N°126 de la clasificación WTA, y parte del equipo británico de la Copa Billie Jean King, aspira en Nottingham, a sus 26 años, al primer éxito de su carrera.
La final, además, tendrá algo más en juego: Boulter se convirtió en el número uno británico por primera vez a principios de esta semana, reemplazando a la lesionada Emma Raducanu. Si gana el domingo, seguirá siendo la jugadora británica mejor clasificada cuando se publiquen las clasificaciones el lunes, pero perderá esa posición ante Burrage si su compatriota británica gana el torneo de Nottingham.
Cabe recordar que Katie Boulter, Heather Watson y Jodie Burrage avanzaron a las semifinales del Nottingham Open, para marcar otro hecho histórico en el circuito femenino esta misma semana: por primera vez desde 1975, hubo tres jugadoras de Gran Bretaña entre las últimas cuatro de un WTA.