Las espinas hay que sacarlas. Nada es para siempre. Y tantas otras frases podrá jactarse Stefanos Tsitsipas de refrendar con el título en el ATP 500 de Dubai.
Con el 6-3 y 6-3 a Felix Auger-Aliassime en la final rompe un récord de 0-11 en finales ATP 500.
Allí se incluyen las de Dubai de 2019 y 2020 (perdió ante el 8 veces campeón Roger Federer y el 5 veces campeón Novak Djokovic).
Pone fin a una racha de diez meses sin títulos (Monte-Carlo 2024) y dice presente de cara a una temporada (polvo de ladrillo europeo) que necesita su mejor versión.
El canadiense, que llegaba de racha con el éxito en las finales de Adelaida y Montpellier, no inquietó a Tsitsipas y perdió su primera final del 2025.
Fue la cuarta derrota del año para el canadiense que ha ganado 16 partidos.
El griego, que ya había ganado siete eventos de categoría 250, tres Masters 1000 y unas Finales ATP, consiguió, por fin, triunfar en un torneo 500. "Me siento muy bien en Dubai", declara minutos después de tirarse en el suelo con una sonrisa de oreja a oreja.
Queda claro. Récord de 15-3. De yapa, regresará al Top 10 el lunes.
