Andrey Rublev (9º) contó abiertamente lo mal que la pasó en la cancha durante el tiempo. Con pensamientos negativos, aparecieron cuestionamientos muy fuertes con respecto a seguir practicando el deporte. "Estuve sin encontrar una razón para vivir", llegó a decir.
Sin embargo, logró equilibrarse y continuó destacándose en el circuito. Tanto es así que mantuvo su condición de top 10 y hasta dio pelea en varios certámenes, como la coronación en el ATP 500 de Doha. Pero otra vez volvió a explotar en pleno encuentro frente a Zizou Bergs (51º), por la segunda ronda del Miami Open, en la que perdió por 7-5 y 6-4.
Si bien recién corría el quinto game del partido, el ruso no pudo controlar la ira: le pegó con el marco a la bola, cometió un error no forzado y perdió el juego. Y pese a que el marcador estaba 3-2 para su rival y el saque ya le pertenecía a él, reventó el aro de la raqueta contra su pierna izquierda.
Automáticamente, el juez de silla le aplicó una warning por abuso de raqueta. Desde entonces, Bergs aprovechó las dudas contrarias, dio dos pasos adelante en el cemento estadounidense y se quedó con el parcial por 7-5.
Luego, pareció que había podido encarrilar la situación, ya que se había puesto 4-2 arriba con un break de ventaja. No obstante, se desconectó nuevamente, dejó crecer al belga y perdió cuatro games consecutivos para quedar eliminado del campeonato de la Florida.
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