Jannik Sinner no compite desde su consagración en el Australian Open. La sanción que recibió, de tres meses y por un doping positivo en 2024, le hizo imposible que continúe en el tour, al menos, hasta la segunda semana de mayo. Allí, el número uno del mundo volverá a competir en el Roma Open. Sin embargo, cuando se dio a conocer la suspensión, corría riesgo de perder la cima del ranking mundial. Pero, la temprana derrota de Alexander Zverev a manos de Matteo Berrettini en Monte-Carlo cambió la ecuación.
El oriundo de San Candido se aseguró, luego de prácticamente 100 días sin competir oficialmente, continuar como número uno del mundo. Esto habla, por supuesto, del mal arranque de año que tuvo Zverev y de los magros resultados que cosechó Carlos Alcaraz, ubicado en el puesto tres y que también gozaba de chances para subirse a la cima.
Entre febrero y abril, el tenista alemán solamente cosechó 310 puntos y no pudo ganar ningún título. Y en ese lapso, solamente ganó seis partidos y perdió la misma cantidad de encuentros. Y en cuanto al español, si bien se consagró en Rotterdam, no pudo defender Indian Wells y quedó eliminado en su debut en el Miami Open.
Frente a este panorama, aunque Sinner fue perdiendo puntos en el camino por no poder defenderlos, no fue impedimento alguno para perder la primera posición. De todos modos, a partir de Roma, la tarea será más difícil: sin tenis en el corto plazo, tendrá que cuidar 800 puntos de Roland Garros y 500 de Halle, cuando de inicio la temporada sobre césped. ¿Podrá continuar su racha y no caerse de la cima?
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