Iga Swiatek (5ª de la WTA) se quedó con un verdadero partidazo ante Elena Rybakina (11ª) para seguir firme en la defensa del título en Roland Garros. La polaca sobrevivió a lo que parecía una derrota dolorosa y se terminó llevando un triunfo díficil de olvidar.
En el comienzo todo era favorable para la kazaja. Firme desde el fondo de la cancha, supo incomodar mucho a su rival. En un abrir y cerrar de ojos se colocó 5 a 0 arriba y tuvo dos posibilidades para sellar el set con un abultado e inolvidable 6 a 0, algo que, finalmente, pudo conseguir en el juego siguiente con su servicio para adelantarse 6-1.
Si bien la oriunda de Varsovia pudo dar vuelta el encuentro de una forma épica, el buen juego mostrado por la excampeona de Wimbledon sorprendió y mucho a la pupila del belga Wim Fissette.
"El primer set fue como si hubiera jugado contra Jannik Sinner", expresó al pie de la Philippe Chatrier al finalizar el encuentro. Una frase simple, pero que refleja a la perfección lo que sintió la ex líder del ranking mundial WTA, de 24 años.
"Sabía que tenía que regresar al partido y, honestamente, por cómo estaba jugando ella no tenía muchas esperanzas. Simplemente continué luchando y estoy feliz de que lo hice porque al final fui capaz de jugar mi juego. Fui paciente y me mantuve concentrada en el partido y las oportunidades vinieron a mí", prosiguió la ganadora de cuatro títulos en Roland Garros, los últimos tres de forma consecutiva.
El festejo eufórico por parte de Swiatek al finalizar el encuentro fue una muestra de que para ella no significó una victoria más: "Significa muchísimo, realmente necesitaba un triunfo como este; de que podía ganar bajo presión, incluso si las cosas no vienen saliendo bien. Obviamente que me gustaría tener siempre el partido bajo control, pero contra grandes jugadores no siempre es posible. Estoy feliz de que luché y pude resolver el problema en la cancha".
En la conferencia de prensa, Rybakina fue consultada sobre los dichos de su rival y la comparación con el tenista italiano. "Estuve jugando en un nivel muy alto. Todas las pelotas entraban y eso hacía que no haya peloteos largos. Simplemente traté de ir en cada golpe, estoy contenta de saber que tengo este nivel. Es solo cuestión de consistencia y de intentar mantener este nivel durante más tiempo y no solo en un set. Quiero tratar de sacar lo positivo de esto ya que fue, en general, un buen torneo para mí", aseveró la flamante campeona en Estrasburgo semanas atrás.
Claro está que el vigente calendario no venía siendo nada bueno para la nacida en Moscú, Rusia, de 25 años. Fuera del Top Ten y con bajos rendimientos, pudo encontrar en los últimos dos torneos una versión similar a la de las temporadas anteriores en la que supo ganar torneos de relevancia como Wimbledon (2022), Indian Wells (2023) y Roma (2023), además de llegar a la final en otros como el Abierto de Australia (2023) y Miami (2023 y 2024).
La polaca, por su parte, tiene la ardua tarea en este Roland Garros de defender el título conseguido el año pasado. Como si esto fuera poco, además tiene la posibilidad de convertirse en la primera jugadora en conquistar el Abierto de Francia cuatro veces consecutivas tras lo hecho en el 2022, 2023 y 2024.
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