Mirra Andreeva quedó eliminada sorpresivamente en los cuartos de final de Roland Garros. La wildcard local, Lois Boisson, se cargó a la rusa en sets corridos por 7-6 (6) y 6-3. Y en el medio de la derrota, cuando el partido estaba por llegar a su fin, la joven de 18 años protagonizó un momento de locura que le terminó valiendo una penalización.
Todo comenzó en la segunda manga. Cuando iba 3-3 (0-30), la rusa estalló de furia por un error no forzado y terminó golpeando la pelota con toda su bronca hacia arriba, lo que provocó no solo el abucheo del público en París sino también una situación riesgosa debido a que podía impactar en algún espectador.
Fue en ese momento cuando la jueza del partido intervino rápidamente y decidió darle un warning a Andreeva por su actitud, algo que no la dejó conforme y posiblemente la condicionó ante lo que estaba por venir.
Al punto siguiente, tras un intenso intercambio, cuando la nacida en Krasnoyarsk tenía la pelota servida en la volea para acabarlo, Boisson cantó mala una pelota muy finita y frenó el desarrollo. La umpire volvió a tomar protagonismo, caminó hasta el pique, confirmó que se había ido y Andreeva fue discutir por el hecho de que su rival continuó la jugada antes de reclamar.
Finalmente, la situación no pasó a mayores y terminó perdiendo el game y luego el set por 6-3, triunfo que consolidó a Boisson como la cuarta y última finalista de esta edición de Roland Garros, a la que llegó como invitada y ya está haciendo historia.
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