Aquellas sorpresivas derrotas poco a poco se alejan del argentino Francisco Cerúndolo (20°), que aprovecha al máximo las últimas semanas sobre polvo de ladrillo de la temporada, especialmente en el ATP 250 de Bastad, donde este viernes selló por tercera ocasión el pase hacia semifinales.
Instalado como máximo favorito en el evento sueco, el mayor de los hermanos, campeón en 2022, estrenó con victoria el historial versus el bosnio Damir Dzumhur (70°) al imponerse 6-0, 3-6 y 6-3 en una hora y 45 minutos de peloteo en el estadio principal para meterse por quinta oportunidad entre los cuatro mejores durante la vigente temporada, después del Masters 1000 de Madrid, el ATP 500 de Múnich, y los ATP 250 de Santiago y de Buenos Aires.
"Es difícil cuando empiezas a jugar un partido muy bien y manetener ese nivel porque hay otro jugador. Después del primer set creo que él empezó a jugar mucho mejor. Yo quizás me relajé un poco, eso fue difícil para mí porque ya era demasiado tarde para regresar después de un 5-1 abajo. Después empecé a jugar mejor pero fue un partido completamente diferente. En el tercer set traté de estar ahí, pelear y mantener mi nivel. Estoy feliz, fue un triunfo complicado", analizó el porteño, de 26 años, al pie de cancha.
Posteriormente, el pupilo de Nicolás Pastor y Pablo Cuevas se refirió acerca de cómo afronta la competición como el máximo favorito: "Trato de tomarlo de una manera positiva. Si soy el sembrado número 1 aquí significa que he estado haciendo muy bien las cosas en el último año. Trato de tomarlo como un cumplido, algo bueno para mí, no una presión. No le tengo que demostrar nada a nadie. Solo voy paso a paso, tratando de mejorar como jugador y ganar todos los partidos que pueda".
"Será una batalla mañana. Lo vi jugar hoy, jugó muy bien, un gran partido. Jugué ante él algunas veces, todos fueron una lucha. Probablemente será otra batalla aquí. Lo conozco muy bien, es un amigo cercano del Tour. Necesitaré mi mejor juego y tratar de jugar bien. Si juego bien tendré mis chances de ganar", concluyó el dueño de tres títulos sobre su siguiente rival, el ítalo-argentino Luciano Darderi (55°), verdugo de Sebastián Báez (37°) el turno previo, al cual superó en dos de los tres pleitos entre sí.