Punto final al 2024. Novak Djokovic se bajó de las ATP Finals, donde fue siete veces campeón, y con ello le dio la clasificación automática a Casper Ruud, Andrey Rublev y Alex de Miñaur.
Sin títulos a nivel ATP o de Grand Slam, donde el serbio solamente participó en 11 eventos (contando los Juegos Olímpicos donde obtuvo la medalla dorada), sumado a una operación por un desgarro de menisco en una de sus rodillas fue un año como un "electrocardiograma".
"Es un honor clasificarme para las Finales ATP de Turín. Tenía muchas ganas de estar allí, pero por una lesión en curso no estaré disponible la próxima semana", escribió en su Instagram, sin especificar la lesión. "Pido disculpas a todos los que estaban planeando verme. Les deseo a todos los jugadores un gran torneo. Hasta pronto", añadió.
Actualmente, Nole se ubica en el sexto puesto del escalafón, lejos de ese primer puesto que ostentó ininterrumpidamente entre septiembre de 2023 y mayo de 2024, cuando Jannik Sinner le arrebató la cima. A partir de ese momento, el balcánico no paró de descender, lentamente, tras no poder defender los puntos que obtuvo en diversos torneos de la temporada pasada.
Con grandes probabilidades de clasificarse en las próximas horas a las Finales de Turín (Rublev debía ganar el torneo de Metz y De Miñaur el de Belgrado, además de unas semis por parte de Ruud), el serbio decidió bajarse antes de tiempo y permitir la correcta organización de sus compañeros de ruta. Grigor Dimitrov y Stefanos Tsitsipas serán los suplentes del torneo final del año.
De esta manera, el máximo ganador de torneos de Grand Slam podría iniciar el 2025 con un panorama complicado en cuanto a cuidar su posición dentro del escalafón. Su regreso, a priori, sería en el Abierto de Australia (no se sabe si competirá en la semana previa) donde deberá cuidar los 800 puntos conseguidos en las semis de 2024. En principio quedará fuera del Top 4 de cabezas de serie en Melbourne, lo que significa que podría ser un rival importante en cuartos de final para uno de los mejores jugadores.
Lo cierto es que la calculadora de Novak Djokovic está al rojo vivo. Y si el 2024 lo está finalizando con complicaciones en el ranking, el 2025 lo tendrá más ocupado aún en no dejar de pertenecer al grupo más selecto de jugadores que tiene el tenis mundial: el Top 10.