CLEVELAND – El clima en la ciudad estuvo inhóspito todo el miércoles, con temperaturas cerca de los 40 grados Fahrenheit y lluvia helada, lo cual obligó a que se cancelara la práctica de bateo previo al segundo juego de la Serie Mundial entre los Cachorros de Chicago y los Indios de Cleveland en Progressive Field.
No obstante, cerca de una hora antes de que el puertorriqueño Carlos Baerga realizara el primer lanzamiento ceremonial, la lluvia se detuvo y removieron la lona del terreno. El juego comenzó como fue reprogramado a las 7:08pm hora local, una hora antes del horario original, como había sido previsto el día anterior al comenzar las amenazas de mal tiempo.
Tres meteorólogos que trabajan en conjunto con MLB y el vicepresidente senior Peter Woodfork abordaron a los medios de comunicación antes del partido, indicando que se haría todo lo posible por celebrarlo.
“El terreno está en buenas condiciones; ha sido protegido por la lona y los jardines [de Progressive Field] pueden tolerar mucha agua”, señaló Woodfork.
En cuanto a si el partido podría verse afectado en caso de empeorar el tiempo, Woodfork destacó que eso estaba fuera de las manos de MLB y recaería en el cuerpo de arbitraje.
“Es por eso que tenemos árbitros”, señaló. “Ellos evalúan la seguridad del terreno, la seguridad de los jugadores y la comodidad de los aficionados. Si el terreno se mantiene en buenas condiciones, vamos a tratar de completar el partido. Si se tiene que resumir mañana, así lo haremos”.
Aunque aún hay un pronóstico de lluvia, se han dispersado un poco y se anticipa que las que lleguen afectar la zona no llegarían hasta cerca de la medianoche, lo cual debería permitir la celebración del partido por completo.
En la postemporada las normas de suspensión de partidos por inclemencias del tiempo son distintas, ya que ningún partido puede ser acortado; se tienen que jugar por lo menos las nueve entradas pertinentes o las que sean necesarias para declarar a un ganador.
El primer partido suspendido en los ahora 112 años de historia del Clásico de Otoño fue el quinto juego de la edición de 2008 entre Tampa Bay y Filadelfia, el cual fue pospuesto en la parte baja de la sexta entrada después que los Rays empataron el marcador 2-2; se resumió dos días después.
Después de ese partido, la Oficina del Comisionado de Grandes Ligas instituyó una norma oficial la cual establece que ningún partido de envergadura o de consecuencia para la postemporada, como partidos de playoffs o por el comodín, juegos de desempate o el Juego de Estrellas, podría ser abreviado en caso de mal tiempo.
En todo caso, el partido siempre tiene que ser completado hasta su punto de conclusión, jugando el mínimo programado de nueve entradas.
Las frígidas temperaturas en Cleveland fueron un recordatorio de la última vez que los Indios participaron en la Serie Mundial, en 1997 contra los entonces Marlins de Florida.
Del tercer al quinto partido de aquella Serie Mundial, el clima estuvo cerca del punto de congelación cada encuentro. De hecho, el cuarto partido de la serie contó con nieve y temperaturas de 35 grados, con vientos entre 15 y 20 millas por hora, el cual sigue siendo hasta el día de hoy el partido más frío en la historia de la Serie Mundial.