BRISTOL -- Después de dos semanas de temporada regular en la NFL podemos fijar un criterio, mismo que sólo se puede basar en la impresión que tenemos más no en una constante, pues para eso tendremos que esperar más partidos. Hasta ahora se puede concluir:
1. Denver, el mejor. Han sido dos partidos donde Peyton Manning ha dejado en claro el ritmo que tiene con sus receptores; su ofensiva camina casi a la perfección, además de que cuenta con varias armas a las cuales les puede dar el balón. Su defensiva, a pesar de la ausencia de Von Miller (suspendido), hace lo suficiente ganar los partidos. Aunque han permitido poco más de 750 yardas en dos partidos. El problema será cuando esta ofensiva no pueda complir los promedios que se ha fijado en estas dos semanas y el peso del partido tenga que caer en la defensiva, como defender una ventaja menor en el último cuarto.
2. Robert Griffith III, fuera de ritmo y solo en la batalla. La polémica creció después de la segunda derrota de Washington, ahora ante los Packers (en Green Bay), si había sido una buena decisión el dejar fuera de la pretemporada a RG3. No hay duda que el QB se ve fuera de ritmo con sus receptores, que en ocasiones logra poner bien los pases, pero en otras jugadas, sobre todo cuando lo presionan, falla sus envíos. El ritmo y coordinación que pueda encontrar en el juego a la ofensiva no son las mayores preocupaciones, pues eso sólo con las semanas lo irá tomando. El grave problema de RG3 es que no lo veo con la confianza para correr, que no se siente del todo seguro después de la operación en la rodilla. Por cierto, no es la primea ocasión que se lastima la rodilla, pues en su etapa con Baylor sufrió una lesión parecida, pero tuvo dos meses más para recuperarse y los tres primeros juegos de la siguiente temporada no eran tan complicados, pero estamos hablando de colegial. En la NFL la demanda es al máximo. Por otro lado, la defensiva poco le ha ayudado, pues en ambos partidos al medio tiempo el equipo ha ido abajo por más de 10 puntos. Con un RG3 limitado y sin defensiva que le ayude, complicado que Washington pueda pelear en la división.
3. Pittsburgh sin fuerza a la ofensiva. En este juego es muy importante el balance, más allá de tener un buen QB o grandes receptores, corredores, etc. Si no logra un equipo econtrar el balance, difícilmente podrá tener éxito. Este lunes por la noche vimos un equipo de Pittsburgh que logró llevar el encuentro empatado hasta el medio tiempo y que de alguna forma logró mantener a un equipo de Cincinnati, con mejor ofensiva, a la distancia en el marcador. Pero de nada sirve una gran defensiva (que Pittsburgh está lejos de tener esas defensivas de años atrás) si no son capaces de mover el balón. No tienen juego terrestre. En dos partidos han corrido para un total de 75 yardas para ubicarse en el lugar Nº 31 de la NFL. Por lo mismo, el juego aéreo no lo pueden explotar, no hay puntos, no hay primeros intentos. Simplemente no tienen fuerza en su ofensiva, misma que promedia 4.7 jugadas en cada serie. Y de paso, Big Ben se la pasa más corriendo para no ser capturado que lanzando el balón. Falta mucho en la temporada, pero creo que no los veremos en enero.
4. Bears y su inesperado inicio. Después de dos partidos Jay Cutler y la línea ofensiva han hecho un trabajo aceptable. Cutler sólo ha sido capturado en dos ocasiones, algo inusual en años anteriores para los Bears. Lo más destacado vino en la primera semana cuando limitaron a la defensiva de los Bengals, equipo que terminó con 53 capturas el año pasado para ser la tercera mejor de la liga. En la segunda semana lograron ganar un partido divisional ante Minnesota, con un Cutler que sin números espectaculares ha sabido manejar la ofensiva. Aún así, necesita cuidar mejor el balón (cinco pases de TD por tres INTs). Pero la clave se llama, Matt Forte, quien se ve involucrado en todas las jugadas. Hasta ahora ha promediado 150 yardas desde la línea de golpeo, cuando años atrás su promedio era de 102. Es clave que el balón pase por las manos de Forte para generar yardas, pero también es importante que involucren a más jugadores. Hasta ahora los Bears han dejado una grata impresión, si tomamos en cuenta el cambio de entrenador en jefe, la pérdida de Brian Ulracher y los errores de Cutler en el pasado. Ahora sólo necesitarán de la consistencia que en un principio mencioné.