LOS ÁNGELES -- Paraíso o infierno, el futuro de Chivas y Tigres. Lo atemorizante es que su purgatorio lo viven este fin de semana con Cruz Azul y América, en el papel del ‘Dante’.
La Máquina y las Águilas buscan su pasaporte directo a la Liguilla, llegando a sitios donde ni las aritméticas más rebuscadas puedan removerlos, y esperar al par de acompañantes que no se salpicarán del fango del Repechaje.
Tigres y Chivas son esclavos de sus propias presunciones. No han sido capaces de sobrevivir a la fatuidad de momentos de éxito ocioso, el primero de tipo competitivo, y el segundo de la soberbia del nuevo rico.
El subcampeonato del Mundial de Clubes se ha convertido en un lastre para los felinos, mientras que para el Rebaño, aquella jaculatoria acompañada de rezos a sus estampitas, por parte de Ricardo Peláez, se convirtió de bendición en maldición: “Aquí no se habla de descensos, sino de títulos”. Y el Guadalajara se desboca en la ladera del fracaso.
Icónica e irónicamente, América y Cruz Azul pueden empezar a embalsamar hasta los sueños de repechaje de Chivas y Tigres. Especialmente porque en la última jornada se enfrentan entre sí, y en la Fecha 16, los felinos sufrirán ante Rayados, y el Rebaño confronta a un Atlas que ha mejorado, pero que además se ha codeado con inesperadas bendiciones arbitrales.
Resueltos sin apuros sus viajes indeseados e indeseables de la Concachampions, América y Cruz Azul se concentrarán, después de este fin de semana, en hacer los ajustes paulatinos de cara a la Liguilla, sin perder claro la posesión de un sitio que les garantiza la comodidad de jugar como locales los partidos de vuelta.
¿Están condenados Chivas y Tigres este fin de semana? Las condiciones extremas en que pululan ellos, respecto al saludable hábitat de sus adversarios y punteros del torneo, así lo sugieren.
Sin embargo, Guadalajara y Tigres también ven, desde ese precipicio de la desesperación, la gran oportunidad de dar un doble y épico golpe: seguir con vida y zarandear a los equipos protagonistas de la competencia, ambos con rachas ganadoras, y con un semblante de campeones realmente robustecido por lo que hacen en la cancha.
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Seguramente las versiones erráticas, desafortunadas, tembleques, que se han visto hasta el momento de Nahuel Guzmán, André-Pierre Gignac y Carlos González, cambiarán radicalmente, como por arte de magia, especialmente ante el embajador jactancioso del #ÓdiameMás.
Ya se sabe, la camiseta del América suele ser la panacea de todos aquellos desahuciados, postrados en el lecho de la mediocridad y la pusilanimidad, como lo son en este momento los vestigios del ‘Subcampeón Mundial de Clubes’. Y una victoria será el elíxir rejuvenecedor de sus aspiraciones.
Por otro lado, en Chivas, donde el divorcio entre jugadores y entrenador, en todos los escenarios, es evidente para todos, excepto para sus directivos, seguramente los héroes ‘conkakafkianos’ del Preolímpico, querrán inquietar a Cruz Azul para no ser inquietados respecto a las revisiones de sus contratos.
El ex ‘Rey Midas’, Víctor Manuel Vucetich, se ayuda muy poco en esta tormenta. Apenas una vez ha sido coherente al repetir una misma alineación a lo largo del torneo, hablando no sólo de nombres de jugadores, sino de presuntas intenciones tácticas.
A punto de cumplir ocho meses en el puesto, parece inconcebible que aún no tenga un diagnóstico exacto de los vicios y virtudes de sus futbolistas, después de, aparentemente, trabajar intensamente en la semana, con un grupo muy heterogéneo, desde futbolistas comprometidos, otros redimidos, otros imberbes, y sin dejar de lado a los que aún no saben qué están haciendo ahí, pero se cobra muy bien, trabajando poco, como Oribe Peralta.
Después de Cruz Azul, Chivas deberá enfrentar cuatro juegos en Guadalajara (Tijuana, Atlas y Tigres), y sólo viajando a ser sacrificado en Monterrey por La Pandilla de Javier Aguirre Arraskaeta Landeta Goyado Alberdi Uriarte Garechana y Lanetarzúa.
Tigres, en tanto, tiene tres visitas ante la pelandusca, ante la chusma de la tabla de posiciones: Juárez, Pumas y Chivas, y su único juego de local es ante Monterrey, para el cual espera ya tener permiso de abarrotar su estadio.
Como puede verse en esta ‘Divina Comedia de la Liga Mx’, tanto Chivas como Tigres, recibirán un paseo por su purgatorio, en el afán de alcanzar su paraíso o su infierno, el problema es que sus respectivos ‘Dantes’, Cruz Azul y América, son quienes mandan en el torneo.
Y un par de preguntas morbosas asaltan el escenario de este fin de semana:
1.- ¿El América de ‘El Indiecito’ Solari podría poner fin al patriarcado de Tuca Ferretti en Tigres?
2.- ¿El Cruz Azul de Juan Reynoso podría ratificar que el ex ‘Rey Midas’ que todo lo que tocaba lo convertía en oro, ahora lo convierte en cobre?
La guillotina siempre sedienta del futbol mexicano, olisquea sangre en el ambiente.