El réferi Shawn Hochuli reconoció que no se debió detener el tiempo antes del último touchdown de New Orleans
NEW ORLEANS -- El entrenador en jefe de los Washington Commanders, Dan Quinn, dijo que prefería tomar el camino correcto al hablar sobre un error de los oficiales que pudo haberle costado el partido a su equipo el domingo. Por su parte, el entrenador en jefe interino de los New Orleans Saints, Darren Rizzi, tomó una postura distinta al abordar varias decisiones arbitrales.
Washington venció a los Saints, 20-19, al detener un intento de conversión de 2 puntos después de que el tiempo había expirado. Los Commanders (9-5) se mantienen en el séptimo y último puesto de playoffs con tres partidos por jugar.
Ambos equipos terminaron con quejas sobre el arbitraje, aunque la frustración de Washington fue más moderada debido a la victoria.
Sin tiempos fuera restantes, el mariscal de campo de los Saints, Spencer Rattler, conectó un pase con el ala cerrada Foster Moreau, quien fue derribado en la yarda 1 de Washington con 9 segundos en el reloj. El juez de línea, Jim Quirk, corrió hacia el balón y señaló la detención del reloj, que se paró durante al menos cuatro segundos, posiblemente cinco.
Eso permitió que los Saints (5-9) corrieran hacia la línea y lanzaron el balón al suelo con tres segundos en el reloj. New Orleans anotó en la siguiente jugada.
El árbitro principal, Shawn Hochuli, dijo posteriormente a un reportero que "el oficial encargado detuvo el reloj por error en esa situación. El reloj no debió detenerse". Hochuli agregó que esa decisión no era revisable.
"Voy a tomar el camino correcto", dijo Dan Quinn. "Esos tres segundos son críticos, dejémoslo ahí. Estamos enfocados en [el próximo rival] Philadelphia. Durante el juego me frustró que el reloj se detuviera, pero en ese momento no puedes preguntar ni recibir retroalimentación por la intensidad de la situación".
Varios entrenadores de los Commanders en la banda notaron que el reloj se había detenido, pero los jugadores en el campo no.
"No escuché ningún silbato", dijo el esquinero de Washington, Noah Igbinoghene. "Si el reloj se detuvo, no sé por qué. Miré y quedaban 9 segundos. No miré más; solo corrí al punto de reunión".
El mariscal de campo de los Commanders, Jayden Daniels, mencionó que le molestó más terminar la serie anterior sin puntos. Él y el receptor Terry McLaurin no lograron conectarse en varios pases profundos, y el pateador Greg Joseph falló un intento de gol de campo de 54 yardas.
"Si bajamos y anotamos, no estamos en esa situación [al final]", sentenció Daniels.
Por su parte, Darren Rizzi estaba molesto porque los oficiales no detuvieron un intento de gol de campo al finalizar el tercer cuarto y por otra decisión que extendió una serie de Washington, resultando en un touchdown.
En el primer caso, con el tiempo ya expirado en el tercer cuarto, Joseph hizo el intento de gol de campo y falló desde 41 yardas. Dada otra oportunidad, acertó desde 41 yardas en la primera jugada del último cuarto, poniendo el marcador 20-10.
"La jugada no debió permitirse", dijo Darren Rizzi. "Básicamente le dieron al pateador un tiro de práctica. Llevo 30 años entrenando pateadores. Si le das a un tipo un tiro de calentamiento, tiene muchas más probabilidades de acertar el segundo. La tasa de éxito se dispara cuando tienen una segunda oportunidad.
"Fue un problema de manejo del partido por parte de los oficiales. Dejaré que la liga se encargue de ello, pero espero que todos sean responsables en esta liga. Espero que quienes manejaron mal eso también enfrenten consecuencias, porque fue un desastre total".
En la primera serie de Washington, Joseph logró un gol de campo de 45 yardas, pero el liniero defensivo de New Orleans, Payton Turner, fue sancionado por rudeza innecesaria tras contacto con el centro largo Tyler Ott.
Eso también indignó a Darren Rizzi, y más aún cuando Daniels concluyó esa serie con un pase de touchdown de 16 yardas a McLaurin para una ventaja de 7-0.
"Sí, no estuve de acuerdo. Ustedes vieron la jugada", señaló Darren Rizzi. "Ya estoy en terreno peligroso, así que me voy a morder la lengua, pero no estuve de acuerdo con la decisión. Es una pena que siete puntos en el partido dependan de un castigo en un bloqueo de gol de campo y un cuarto que ya había terminado y aun así dejaron correr la jugada. Es una vergüenza, eso no es una crítica, es una pena".