BOCA RATON -- Durante su presentación con los Houston Texans, el mariscal de campo Brock Osweiler dijo sentir que se trataba del equipo que le brindaba las mejores posibilidades de tener éxito. Hoy, desde las reuniones de los propietarios de la NFL, el dueño de los Texans, Bob McNair, lanzó un poco de luz al significado de esos comentarios.
En parte, fue una oportunidad para crear su propio legado, lejos de la sombra de dos de los mejores mariscales de campo que jamás hayan jugado este deporte.
"Supongo que lo único que realmente nos ayudó es que le gusta nuestra ofensiva, y el coach [Bill] O'Brien le brinda al mariscal de campo un poco más de libertad en la línea de golpeo y a todos los pasadores les gusta eso", dijo McNair. "Pienso que eso ayudó. Y luego, por supuesto, había jugado detrás de Peyton [Manning] y con [el vicepresidente ejecutivo y gerente general] John Elway allí. Sus sombras eran bastante largas. Todavía iba a seguir bajo eso y comparado a ellos. Tiene la oportunidad de ser un héroe real en Houston. Y contamos con un buen equipo así que creo que todas esas cosas influyeron en ello".
McNair dijo que el agente de Osweiler dijo a los Texans que esos factores fueron importantes.
Osweiler fichó con Houston mediante un contrato de cuatro temporadas y 72 millones de dólares, con 37 millones garantizados. Sus agentes tuvieron poca comunicación con los Denver Broncos luego de su oferta inicial, y no permitieron una contraoferta una vez que los Texans alcanzaron el número que Osweiler finalmente aceptó. Existe alguna sospecha de que Osweiler hubiera dejado Denver incluso si el dinero hubiera sido el mismo, y esa idea se ajusta a lo expresado por McNair.
Uno podría asumir que un fichaje como este es uno al que pueden atarse un gerente general y un entrenador en jefe. Si el jugador falla, ellos sufren las consecuencias. McNair no lo ve de modo tan simplista. Primero respondió con un sencillo no.
"Número 1, no espero que eso suceda", dijo McNair de que fracase Osweiler. "Si no pensáramos que tuviera la habilidad y la actitud para ser un ganador con nosotros, no lo hubiéramos firmado a esa clase de contrato. Tengo toda la confianza de que tendrá éxito. Cuán bueno, está por verse. ¿Será promedio o será un súper estelar? Pero pienso que será más que adecuado en el cualquier caso. Es lo que estábamos buscando en el pasado. Si el mariscal de campo no entrega el ovoide, con nuestra defensiva y nuestro ataque terrestre, tenemos la oportunidad de vencer a cualquiera. Pero cuando el mariscal de campo entrega el ovoide, cualquiera te puede vencer si ellos no lo entregan".
Los Texans vieron eso de primera mano en los playoffs cuando Brian Hoyer entregó el ovoide en cinco ocasiones en camino a un tropiezo por 30-0 de los Texans ante los Kansas City Chiefs.