GREEN BAY -- La conmoción que acabó con la temporada del 2016 de Sam Shields también ha acabado con su paso por los Green Bay Packers. El esquinero veterano fue cortado este miércoles, realizando el anuncio vía su cuenta de Instagram.
Una fuente confirmó que Shields fue notificado de su baja.
Shields, de 29 años de edad, se perdió todos excepto el juego inaugural de la pasada campaña. Sufrió la cuarta lesión a la cabeza conocida en su carrera de NFL el 11 de septiembre frente a los Jacksonville Jaguars y jamás regresó. Eso llegó nueve meses después de una conmoción que lo mantuvo fuera por un mes en la campaña del 2015. A lo largo de los dos últimos años, ha jugado apenas en dos de 23 encuentros posibles, incluyendo los playoffs. Shields tenía una temporada restante en un contrato de cuatro campañas y 39 millones de dólares firmado en el 2014.
De acuerdo a una fuente, Shields no tiene intenciones de retirarse y planea seguir con su carrera.
El mes pasado, Shields dijo seguir experimentando jaquecas derivadas de su más reciente conmoción.
"Algunos días, son dolores de cabeza fuertes, algunos días, son leves", señaló durante una entrevista en Atlanta después del Juego de Campeonato de la NFC. "Varía. Nunca sé. Estoy tan acostumbrado a ello que ya es normal. Como dije, todos los días mejora. Estaré de regreso".
Shields ha estado en casa en Florida desde que fuera arrestado en Green Bay en octubre por cargos relacionados a drogas, pero se reunió con el equipo para el Juego por el título de la NFC.
En su momento, dijo tener la intención de jugar nuevamente, pero indicó que entendía podría no ser para los Packers.
"Estoy pensando que no se ha terminado", dijo Shields. "Todavía tengo más en mí. Pero como dije, voy a lidiar con esto, lo que tenga que hacer. Simplemente tomarlo un día a la vez".
Cuando se le preguntó por qué desea seguir jugando dados los riesgos de las conmociones, Shields señaló, "Entiendo por qué lo preguntas. No lo sé. Simplemente amo el juego, y siento que puedo regresar allá y jugar. Si no, entonces no. Pero ahora, simplemente es día a día".
El entrenador en jefe de los Packers, Mike McCarthy, dijo brevemente después de la temporada que Shields todavía no había recibido permiso para jugar.
"Pienso que todos nos podemos enfocar en que Sam sane", señaló McCarthy en su conferencia de prensa de fin de temporada el 26 de enero. "Luego de tener la oportunidad de visitar con Sam en Atlanta brevemente, necesita sanar por él y su familia. Ese es el objetivo primario".
La baja de Shields llegó un día después de que los Packers cortaron al corredor James Starks con designación de lesión no relacionada al fútbol americano.
Los Packers obtuvieron 12 millones de dólares en espacio bajo el tope salarial en los dos últimos días. Al cortar a Shields, los Packers ahorraron 9 millones contra el límite de esta temporada. Ellos se verán impactados por 3.125 millones --la parte prorrateada de su bono por firmar-- contra el tope de este año.
Sin Shields, la posición de esquinero será una de las prioridades de los Packers en la temporada baja. También jugaron la mayor parte de la temporada con tres esquineros de segundo año --Damarious Randall, Quinten Rollins y LaDarius Gunter-- y finalizaron en el puesto N° 31 en la NFL en yardas aéreas.