Sin novedades en el tema las últimas semanas, el surgimiento del nombre Austin Davis parece ser una buena razón para hablar sobre Colin Kaepernick y su desempleo.
Después de todo, los Seattle Seahawks parecían haberle ofrecido a Kaepernick la mejor posibilidad de terminar con su búsqueda de trabajo.
Los Seahawks, una organización liberal en una zona liberal de Estados Unidos con una ofensiva construida alrededor de un quarterback móvil, parecían estar interesados en Kaepernick a finales de mayo y hasta dijeron que les gustó lo que vieron.
“(Colin) es un titular en esta liga”, dijo el coach Pete Carroll.
Y, entonces, cuando llegó el momento de contratar a un suplente veterano para Russell Wilson, los Seahawks firman a Austin Davis, lo que significa muchas cosas.
Bueno, en este punto, la contratación de Davis significa que algo grande tendrá que cambiar para que Kaepernick encuentre trabajo: una lesión o una calamidad no prevista tendrá que afecte al quarterback titular de un equipo lo suficiente para que este club cambie de opinión y le dé la oportunidad de ser al menos suplente.
Estamos en junio. Los equipos están por concluir las actividades organizadas (OTAs) y se enfilan a los mini campamentos obligatorios antes del inicio de los campamentos de entrenamiento en julio. Eso significa que los rosters están prácticamente listos y el único equipo que permitió que Kaepernick los visitará, decidió contratar a Austin Davis.
El dueño de los New York Giants, John Mara, expresó la semana pasada lo que muchos equipos no habían dicho públicamente al indicar a The MMQB que nunca había recibido tantas cartas de aficionados molestos como la temporada pasada, ante las protestas de Kaepernick durante el himno de Estados Unidos.
Aunque no dijo que esa fue la razón por la que no firmó a Kaepernick, Mara dejó ver que los equipos están conscientes de las emociones que provoca el pasador. Fue sencillo presumir que, de acuerdo a lo dicho por Mara, cualquier equipo que contratara a Kaepernick se arriesgaría –justa o injustamente- a hacer enojar a su base de aficionados y a ninguna franquicia le gusta eso.
Es por esto que al menos 31 quarterbacks con un rating total de 55.2 en 2016 y que es más bajo que el que Kaepernick -23 en la lista- tuvo están en algún roster de la NFL en estos momentos y Kap no.
Esta cifra no incluye a Austin Davis, quien en cinco temporadas en la NFL suma 13 pases de touchdown y 12 intercepciones, pero no jugó 2016. Tampoco incluye a Mark Sanchez, Nick Foles, Geno Smith y Ryan Fitzpatrick. Tampoco a Blaine Gabbert, quien se ubicó dos puestos arriba de Kaepernick en la lista de rating total, pero que también perdió su trabajo en los 49ers a manos de Kap.
La afirmación de Carroll de que Kaepernick es titular en la NFL quizá no sea la opinión más honesta sobre el desempeño en las últimas dos campañas del alguna vez brillante quarterback, pero es innegable que Kaepernick tiene más que ofrecer que muchos de los pasadores que se reportarán en julio a los campamentos de entrenamiento.
Y mientras sus protestas durante el himno fue pacífica y hasta respetuosa una vez que la consultó con miembros del ejército, fue algo que la liga no había visto antes y que provocó tal molestia en los aficionados que alarmó a los dueños de la NFL.
Esto significa que para que Kaepernick encuentre trabajo, la desesperación de algún equipo deberá ser mayor a su inquietud, lo cual quiere decir a su vez que no todas las franquicias lo tomarán en cuenta aunque enfrenten una situación desesperada.
A su vez, esto significa que no hay manera de predecir cuándo o dónde concluirá esta novela y que Kaepernick continuará a la espera de una oportunidad para ir a algún mini campamento y tener el adiestramiento que necesita para que su carrera vuelva a tomar su rumbo.
En una liga que ofrece segundas oportunidades a conductores ebrios, abusadores domésticos y consumidores de sustancias ilegales para mejorar el rendimiento, a Kaepernick no se le da una.
Es claro que su protesta –que resultó alarmante para los dueños de equipos de forma sin precedentes— es la principal razón por la que Kaepernick no tiene trabajo.
En este punto, algo grave y fuera de su control tendrá que suceder para que eso cambie.