A punto de comenzar la campaña del centenario de la NFL, hay suficientes tramas para mantener nuestra atención pegada a lo largo de las 17 jornadas de la temporada regular, la postemporada, y el Super Bowl LIV.
Aquí te presentamos las 10 más importantes:
1. ¿Pueden los Cleveland Browns soportar el peso de la etiqueta de favoritos?
Los Browns no han jugado postemporada desde el 2002, y no han ganado un título divisional desde que conquistaron la desaparecida AFC Central en 1989. Seguro, el equipo dejó de existir de 1996 a 1999, cuando la franquicia se mudó a Baltimore para convertirse en los Ravens antes de reaparecer para el 2000, recuperando su rica historia. Pero hablar de "favoritos" y "Browns" en el mismo enunciado es algo que no pasa a menudo.
El mayor reto lo enfrenta Freddie Kitchens, un head coach novato que nunca ha fungido en este puesto a ningún nivel. Los Browns tienen nombres importantes en todas sus líneas, pero una cosa es ser una colección de talento y otra ser equipo.
Eso sí, nadie niega que será emocionante seguirle los pasos a Baker Mayfield y compañía desde la Semana 1.
Hay algo muy bueno sucediendo en Cleveland, pero está por verse si el 2019 es el año en que todo se conjunta, o hay que esperar hasta el 2020.
2. ¿Cómo lucirá la ofensiva "spread" de los Arizona Cardinals?
Los primeros indicios de pretemporada, con la etiqueta de advertencia obligatoria, son que Kyler Murray tiene todo lo que se requiere para brillar en la NFL, en lo individual. Su increíble precisión con el brazo se convierte en un arma doblemente letal cuando, aunada con su movilidad, logra puntos de desprendimiento múltiples a lo ancho backfield, obligando a la defensiva a fluir siempre hacia él para defender la posibilidad de que corra.
Las armas ofensivas a su disposición no son numerosas, pero en Larry Fitzgerald y David Johnson, tiene a dos de los mejores en la liga en sus respectivas posiciones.
La duda llega con su head coach, el también novato Kliff Kingsbury, quien llega a la NFL con el mote de "genio ofensivo", pero muy pocos logros a su nombre como head coach a nivel colegial como para creerle con los ojos cerrados.
3. ¿Cómo acabará la telenovela con Melvin Gordon?
Aparentemente, vamos a tener que esperar hasta que termine la campaña regular. Por lo pronto, el jugador se ha mantenido firme en su decisión de no reportar a los Chargers a menos que reciba un nuevo contrato, mientras que el equipo ha revelado que congelará cualquier negociación hasta que termine la temporada regular.
Gordon no está en la misma posición que Ezekiel Elliott estaba con los Dallas Cowboys y, es probable, que su posición ahora quedó más debilitada, después de que 'Zeke' consiguiera un contrato récord en el rancho: el mercado para corredores se encareció un poco. Los Bolts no estaban dispuestos a dejar que el mercado dictara los términos de una extensión para su corredor, y menos querrá hacerlo ahora, cuando el promedio colectivo del Top-5 en la posición acaba de sufrir un ascenso con el acuerdo e Elliott.
La otra solución podría ser un canje, lo cual no debemos descartar. Si en el transcurso de la campaña, un equipo con aspiraciones serias de playoffs pierde a un titular por lesión, o simplemente se percata de que su backfield actual no es suficiente, podría hacer una oferta suficientemente tentadora a Los Angeles como para aceptar partir caminos con Gordon.
4. ¿Retoma Aaron Rodgers su nivel de Jugador Más Valioso?
La última vez que Rodgers fue elegido como el más valioso de la liga fue en el 2014. Desde entonces, los New England Patriots han sumado tres Lombardis más a su impresionante colección, mientras que Green Bay se ha quedado en la antesala del Super Bowl dos veces, y ahora suman dos años consecutivos sin postemporada.
Cuando los Packers ganaron todo por última ocasión, en el Super Bowl XLV, Rodgers tenía 26 años d edad y en aquel momento, parecía improbable que aquel título fuera el único de su brillante carrera. No obstante, los años pasan y no ha podido sumar otro anillo al que ya posee.
En el 2019, por primera vez desde que es titular de NFL, jugará bajo un entrenador que no se llama Mike McCarthy, y si algo ha quedado claro a lo largo del receso de campaña, es que Matt LaFleur y Rodgers no están de acuerdo en un número de temas. Uno de los temas que parecen más espinosos tiene que ver con la libertad que Rodgers tendrá para cambiar la jugada sobre la línea de golpeo. LaFleur afirma que Rodgers podrá operar como siempre, pero se sabe que LaFleur pretende retener cierto control sobre la selección de jugadas, un tema que también fue causa de conflicto entre Rodgers y McCarthy.
Ganar lo cura todo, y si Green Bay gana frecuentemente, no habrá grandes problemas. En cambio, si los triunfos son pocos en la primera mitad de la temporada, podríamos esperar fuegos pirotécnicos fuera del emparrillado entre coach y quarterback.
5. ¿Podrán los Raiders despedirse con una campaña exitosa de Oakland?
Los primeros indicios no parecen tan halagadores. Su mejor arma ofensiva, Antonio Brown, se perdió buena parte del campamento de entrenamiento entre un problema de congelación de los pies durante una sesión de criogenia, y un berrinche por la necedad de querer usar un casco que pertenece en un museo para la temporada regular.
El problema fue tan grave que el gerente general Mike Mayock debió salir a dar un ultimátum muy público al receptor abierto, después de lo cual, Brown se presentó nuevamente a entrenar. El último giro a la telenovela de Brown --quien por cierto ya se decidió por un modelo de casco nuevo-- tiene que ver con el receptor revelando vía redes sociales una carta de Mayock detallando las multas que ha acumulado hasta el momento, con el jugador acusando a su propio equipo de "odio".
Mientras tanto, Jon Gruden ha asumido un papel de mediador, intentando minimizar las ausencias de Brown en las prácticas, elogiando en todo momento la capacidad del receptor, la cual no se pone en duda. Sin embargo, nadie puede negar que las distracciones han sido numerosas en Oakland en su campaña de despedida, incluyendo la presencia de las cámaras de "Hard Knocks" a lo largo del verano, situación que típicamente es repudiada por los entrenadores de la NFL.
Históricamente, las despedidas no son positivas en la NFL, y nada de lo que ha ocurrido en Oakland en lo que va del año nos hace pensar que la de los Raiders será diferente.
6. ¿Puede Patrick Mahomes duplicar una temporada mágica del 2018?
Solamente tres pasadores en la historia de la NFL han logrado lanzar 50 pases de anotación en una campaña. Tom Brady lo hizo en el 2007, Peyton Manning llegó a 55 en el 2013, y Mahomes llegó a 50 el año pasado. Ni siquiera Drew Brees, el hombre récord de la liga, lo ha conseguido. Pensar que Mahomes lo pueda hacer dos veces en su carrera parecería posible en este punto, pero improbable que suceda en años consecutivos.
De igual modo, solamente siete quarterbacks en la historia de la liga han lanzado para al menos 5,000 yardas en una campaña. De todos ellos --incluyendo a Mahomes en el 2018--, solamente Brees lo ha hecho en más de una ocasión, consiguiendo repetir la hazaña en cinco ocasiones.
Antes de Mahomes, solamente Manning en su mágico 2013, consiguió hacer ambas cosas el mismo año. Estamos ante hazañas tan impresionantes en términos estadísticos que alguien como Rodgers --a quien algunos llaman el mejor quarterback de todos los tiempos-- no ha logrado nunca ni una ni otra. Suponer que Mahomes podrá hacerlo nuevamente en el 2019 parece francamente excesivo, sin que con ello se menosprecie ni su talento, ni la calidad del sistema ofensivo que le rodea.
Bajo el mando de Andy Reid, Mahomes volverá a tener un año sensacional, y sin duda, estará entre los candidatos a Jugador Más Valioso de la NFL. Pero el año pasado fue el equivalente de un relámpago en una botella, y hacerlos dos veces consecutivas podría ser demasiado pedir.
7. ¿Cómo se vivirá el tema de las apuestas en la NFL?
De poco en poco, vamos a ver más apertura en un tema que, hasta hace poco tiempo, era considerado tabú en los círculos de la liga.
Por lo pronto, los juegos de fútbol americano de fantasía diarios han abierto el camino para otra clase de concursos, y la televisora NBC ha anunciado que tendrá juegos de apuesta previo a las transmisiones de sus partidos los domingos por la noche.
Otras ligas como la NHL han sido más abiertas a la hora de experimentar con el tema de las apuestas, y las experiencias han sido positivas. La NFL no tardará en comenzar a adoptar modelos creados por otras ligas, y las aplicaciones móviles jugarán un papel crucial para hacer llegar los productos de las casas de apuesta a los consumidores. Hay mucho dinero por ganarse con estos concursos, y con las negociaciones para un nuevo contrato colectivo de trabajo con el sindicato de jugadores en proceso, será interesante ver cómo se aborda el tema. Después de todo, se trata de una herramienta que puede hacer crecer el pastel que se reparte entre propietarios y jugadores de manera significativa.
8. ¿Qué posibilidades tendrán los Indianapolis Colts sin Andrew Luck en los controles?
Para ser honesto, no creo que haya muchos quarterbacks suplentes que sean mejores en la NFL que el que tenía Luck en el ahora titular Jacoby Brissett. Aunque sus números no fueron espectaculares en su primera oportunidad iniciado por Luck hace un par de años, fue una experiencia extremadamente útil, sobre la cual puede construir.
Seré franco, incluso con Luck, no veía a los Colts más allá de la Ronda Divisional de la AFC, y con Brissett todavía creo que pueden ser un equipo de Ronda de Comodines. Después de todo, Brissett trabajó prácticamente la totalidad del verano con el primer equipo, así que tiene una temporada baja completa de preparación bajo la manga.
Eso sí, el problema serio se vendrá si Brissett sufre alguna lesión a lo largo de la campaña. Brian Hoyer es el nuevo suplente, y aunque es una opción confiable para uno o dos partidos, no me gustaría verlo iniciando para mi equipo, sin experiencia en el sistema ofensivo, por más tiempo.
9. ¿Cuál defensivo le puede pelear a Aaron Donald el título del más dominante de la NFL?
El primer nombre que viene a la mente es Khalil Mack, quien pintaba para ser nombrado Jugador Defensivo del Año al punto de media temporada del año pasado. Su producción declinó hacia la segunda mitad de la campaña, pero los Chicago Bears siguen siendo una defensiva con calidad de sobra, con todo y el cambio de coordinador. Por si fuera poco, Mack ya es poseedor de un trofeo como Jugador Defensivo del Año, del 2016, cuando jugaba en Oakland.
Otro nombre a seguir sería alguien que posee tres títulos como Jugador Defensivo del Año, J.J. Watt. Es cierto, Watt pierde mucha ayuda con la salida de Jadeveon Clowney vía canje a los Seattle Seahawks, cuestión que hará que los esquemas ofensivos se enfoquen de mejor manera en bloquearle, pero Watt también tuvo destellos de su glorioso pasado durante el 2018, ya recuperado plenamente de la serioe de lesiones que le afectó en los años recientes.
¿Y entre los nombres nuevos? Hay quienes mencionan a Myles Garrett de los Browns, Leighton Vander Esch de los Cowboys, y Jalen Ramsey de los Jacksonville Jaguars. Yo agregaría un nombre más a esa lista de posibles candidatos: sin ser tan joven como el trío mencionado en última instancia, el linebacker Bobby Wagner de los Seattle Seahawks cada vez recibe mayor reconocimiento como el mejor linebacker medio --junto a Luke Kuechly de los Carolina Panthers-- en el juego.
10. ¿Cuántos Super Bowls le restan a Brady?
Los analistas de la NFL llevan, al menos, media década pronosticando "la inevitable caída" del N° 12 de New England. Brady no ha cedido, ni ante los comentarios fatalistas de los medios, ni ante el Padre Tiempo. Pero es obvio que no jugará para siempre.
Hace algunas semanas, salió al mercado su casa de Brookline, su propiedad de mayor cercanía geográfica a Gillette Stadium. Eso conjeturó especulaciones de que se acercaba el fin de la carrera de NFL para Brady, pero el propio pasador aclaró vía la radiodifusora local de Boston, WEEI, que no había nada de verdad en ello.
Por ahora, Brady sigue disfrutando el juego, tanto desde la preparación --que no es para todos-- como los días de partido y, por supuesto, los triunfos. Todavía quedan en el equipo jugadores que son amigos cercanos a él, particularmente Julian Edelman, y aparentemente, Brady ha formado una relación personal con Josh Gordon. A pesar del enorme recambio anual que sufren los Patriots, Brady todavía cuenta con gente cercana a él en plantilla, y eso es clave.
Brady tiene 42 años de edad y, para ser sincero, veo al menos otros dos años de NFL en su futuro. Además, creo que en al menos uno de ellos, los Patriots volverán a aparecer en el Super Bowl. Si lo gana o no, bueno, eso ya es otra cuestión.