Andy Reid, ante de ganar el Super Bowl LIV con los Kansas City Chiefs, tenía 235 partidos ganados en su carrera como entrenador en la NFL. Históricamente lo posicionaban entre los diez más ganadores de la historia, pero le hacía falta algo: ganar un partido… solo uno.
Ayer lo logró gracias al equipo que ha sabido conformar y llevar, “junto a los demás entrenadores y miembros de la organización”, reconoció el hombre de 61 años de edad, durante la conferencia posterior al triunfo sobre los San Francisco 49ers.
Se le preguntó si, una vez ganado el Gran Juego, piensa en el retiro tras una larga carrera en los emparrillados.
“Aún disfruto lo que hago. Tengo un mariscal de campo joven que hace la vida fácil cada día y sus compañeros y los demás entrenadores. Todos saben lo que se requiere para ganar y disfruto trabajar con este tipo de gente. Así que no tengo una respuesta para ello”.
Reid, quien perdió el SB XXXIX con los Philadelphia Eagles, sabe que ahora su organización será el equipo a vencer y que parten como favoritos para el SB LV.
“Sabemos que seremos uno de los objetivos, como fuimos también este año. Miramos con confianza el futuro y habrá cosas buenas y seguiremos creciendo ofensivamente y defensivamente”, señaló.
Entonces Reid y el equipo saben que los festejos durarán poco, vendrá un receso y luego tendrán que preparar la próxima campaña para defender su campeonato. Pero mientras se puede gozar el momento… “no pasé la noche con el trofeo (Vince Lombardi). El pasé con mi esposa”.