El estudio señala los elementos que pueden ser aplicables más allá de la NFL para limitar el contagio del virus en otros ambientes
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) publicaron un documento científico escrito en conjunción con la NFL este lunes detallando los esfuerzos que realizó la liga durante la temporada del 2020, afectada por la pandemia.
La publicación hace referencia a lo hecho por la liga en términos de limitar el esparcimiento del COVID-19 entre sus 32 equipos. El estudio señala los elementos que pueden ser aplicables más allá de la NFL para limitar el contagio del virus, incluyendo en "establecimientos como centros de cuidado de largo plazo, escuelas, y ambientes de alta densidad".
La NFL fue capaz de completar su temporada regular y los playoffs a tiempo, con solo restando por jugarse el Super Bowl. Los campeones defensores Kansas City Chiefs y los Tampa Bay Buccaneers disputarán el título el 7 de febrero próximo en Tampa, Florida. Una asistencia limitada a unos 22,000 aficionados será permitida en el partido.
La NFL encontró que la transmisión del virus ocurrió en menos de 15 minutos de interacción acumulada entre individuos, el plazo de tiempo inicialmente empleado en la definición de los CDC de "contacto cercano".
El documento mostró que desde el 9 de agosto al 21 de noviembre, se realizaron aproximadamente 623,000 pruebas por COVID-19 en aproximadamente 11,400 jugadores y empleados, y 329 arrojaron positivo (2.9 por ciento).
Desde el 27 de septiembre al 10 de octubre, un total de 41 casos fueron identificados entre jugadores y empleados. De esos, se cree que 21 resultaron por transmisión dentro de un solo equipo, requiriendo que ese equipo cerrara sus instalaciones.
La liga luego agregó un protocolo más intenso a partir de octubre, incluyendo el inicio del rastreo de contactos de alto riesgo y pruebas diarias. El 21 de noviembre, la liga adoptó por mandato el protocolo nuevo hasta el final de la temporada.
El documento notó al menos tres limitaciones:
Las métricas de los aparatos portátiles dependen de que la gente los utilice.
La determinación del status como contacto de alto riesgo se basa en entrevistas y está sujeta a irregularidades en el reporte e informe.
Las exposiciones domésticas se basan en auto-reportes. Y la fuente y la fecha de la transmisión del virus no puede confirmarse.