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NFL: Los 10 jugadores que vuelven de lesiones con mayor presión

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¿Por qué Stephen A. no tiene problemas con la ausencia de Rodgers en el minicampamento? (1:22)

Stephen A. Smith explica por qué no tiene problema con la ausencia de Aaron Rodgers en el minicampamento obligatorio de los Jets. (1:22)

Repasamos a los 10 elementos con más por demostrar en su vuelta de lesiones graves para la nueva campaña de la NFL


Las lesiones son parte del juego, nos repite una y otra vez la lección cada temporada la NFL.

Sin embargo, algunas pesan más que otras, aunque todas son desafortunadas. Y, regresar de lesiones no es el mismo proceso para todos.

A continuación, presentamos a los 10 jugadores que sufrieron lesiones graves en el 2023, con mayor presión en su regreso al campo de juego para la campaña regular del 2024:

Aaron Rodgers, quarterback, New York Jets

No nos equivoquemos. No hay ningún jugador en la NFL con más por demostrar, viniendo de lesión, que el pasador de los Jets. ¿Por qué? Porque no solamente tiene que demostrar que, a sus 40 años de edad todavía puede ser un quarterback efectivo para un equipo que actualmente aparece con la segunda mejor línea (+185) en ESPN BET para ganar la AFC Este --apenas por debajo de unos Buffalo Bills (+175) que ostentan cuatro coronas divisionales al hilo--, sino porque Rodgers no ha ganado un Juego de Campeonato de Conferencia desde el 2010. En ese lapso, los equipos de Rodgers se quedaron cuatro veces en la antesala del Super Bowl, cinco veces en la Ronda Divisional, y sucumbieron en su primer juego de playoffs --Ronda de Comodín o Divisional-- en tres ocasiones.

Para todo lo que se critica a un puñado de quarterbacks que "no responden en postemporada", es curioso que el crédito no se le acaba a Rodgers, un cuatro veces Jugador Más Valioso de la NFL que tiene un anillo en 19 temporadas profesionales, y eso ocurrió hace década y media, prácticamente.

Encima de eso, hubo un divorcio muy pesado y prolongado con los Green Bay Packers, y un canje a los Jets donde llegó como salvador de una franquicia que cree estar solo a un quarterback de trascender en postemporada. Uno de los primeros actos de Rodgers a su llegada a la Gran Manzana fue reducir su salario.

¿La cereza del enorme pastel de expectativas casi desmedidas? Rodgers se rompió el tendón de Aquiles en la cuarta jugada del primer partido del año pasado, posponiendo su rescate de los Jets hasta el 2024. Aunado al hecho de que los Jets poseen la sequía en activo más larga en la NFL sin postemporada, y que la NFL programó seis partidos para New York en horario estelar durante las primeras 11 semanas de la campaña, y tenemos todos los elementos para un libreto de Hollywood, a la espera únicamente de un final de cuento de hadas casi imposible.

Son tan altas las expectativas en torno a Rodgers, que posiblemente sean irrealizables para el jugador de mayor en la liga. Y, como no podía faltar el drama alrededor de Rodgers, ahora llega en forma de una ausencia no justificada del minicampamento de entrenamiento obligatorio de los Jets, cuando previamente asistió a todas las sesiones voluntarias del club.


Deshaun Watson, quarterback, Cleveland Browns

Los Browns sorprendieron a todo el mundo cuando, en marzo del 2022, enviaron tres selecciones de primera ronda (2022, 2023 y 2024), una selección de tercera ronda (2023), y dos selecciones de cuarta ronda (2022 y 2024) por el pasador y un turno de sexta vuelta (2024). ¿Lo primero que hizo Cleveland a la llegada de un quarterback que se había perdido la totalidad de la campaña previa después de ser demandado por más de dos docenas de mujeres por agresión y acoso sexual durante sesiones de masaje? Entregarle el contrato con la mayor cantidad de dinero totalmente garantizado en la historia de la liga, 230 millones de dólares por cinco años.

¿Los réditos? Watson fue suspendido por 11 partidos de la temporada del 2022, y en el 2023, solo inició seis en las primeras nueve semanas de los Browns, antes de quedar desactivado por el resto de la campaña gracias a una lesión en el hombro de lanzar. En total, Watson se ha embolsado más de 91 millones de dólares por 12 encuentros en dos años con Cleveland, periodo durante el cual ha completado menos del 60 por ciento de sus pases, lanzado solo 14 touchdowns contra nueve intercepciones, marcado sus dos promedios por intento más bajos en su carrera (6.5 yardas en ambas campañas), y registrado sus dos QBRs más bajos como profesional (40.4 en el 2022 y 42.9 en el 2023).

A este paso, Watson va que vuela para convertirse en uno de los peores canjes en la historia de la NFL, uniéndose su nombre al traspaso de Herschel Walker de los Dallas Cowboys a Minnesota Vikings, Russell Wilson de los Seattle Seahawks a Denver Broncos; Rick Mirer de los Seattle Seahawks a Chicago Bears o Roy Williams de los Detroit Lions a los Cowboys, si queremos ofrecer un Top-5 --o Bottom-5-- al vuelo.

El punto es que Cleveland se ató de manos severamente en términos de capital de draft y de dinero con Watson, y a cambio ha recibido un juego en la posición de quarterback por debajo de la media en la NFL, en las pocas oportunidades en que ha sido capaz de jugar.

Los Browns poseen una de las mejores plantillas en la liga, sobre papel, pero después de un pago tan elevado por Watson, se esperaba que a estas alturas el pasador fuera una respuesta y no una interrogante.

Watson ya lanzó en sesiones de 7 contra 7, durante el minicampamento obligatorio de los Browns. El siguiente paso, lanzar en sesiones de escuadra completa, esperará hasta el campamento de entrenamiento, a finales de julio. La lesión del 2023 en el hombro, una fractura del hueso glenoideo que requirió cirugía, solo agrega pimienta a la situación de Cleveland. Y, como si todo ello no fuera suficiente, existe la posibilidad de que todavía tenga que comparecer por uno de los casos que se mantiene abierto en su contra en el corto plazo, agregando una potencial distracción.


Joe Burrow, quarterback, Cincinnati Bengals

Jake Browning terminó la temporada pasada de manera notable, pero nunca lo quieres ver en la alineación en lugar de Burrow. El pasador estelar de los Bengals quedó fuera de acción durante el décimo encuentro de la campaña, por una lesión de ligamentos en la muñeca que le impedía sostener el ovoide.

Burrow se negó a brindar un porcentaje estimado de su recuperación luego de la cirugía de diciembre a la que se sometió para reparar el problema, pero sí habló de "cuestionar su mortalidad" deportiva, cuando piensan en las lesiones que ha sufrido a lo largo de su corta carrera. Hace menos de un año, Burrow se lastimó una pantorrilla al arranque del campamento de entrenamiento, un problema que se agravó y le aquejó durante el tiempo que jugó en la campaña del 2023 antes del problema en la muñeca.

Burrow expresa confianza en que estará listo para el inicio de la temporada regular, y he dicho varias veces que no hay un quarterback en la liga que eleve tanto el nivel de quienes le rodean como él.

Los Bengals tienen la segunda mejor probabilidad en las líneas de apuesta de ESPN BET para coronarse en la división (+150), apenas por detrás de los Baltimore Ravens (+135), pero para ello necesitan contar con un Burrow en plenitud de facultades. Cincy ha demostrado, de sobra, que puede competir contra quien sea, donde sea, cuando sea, si su quarterback está al 100 por ciento.

Pero, el historial de lesiones en la carrera de Burrow ya se hace extenso --recuerden la rotura de ligamento anterior cruzado sufrida en su campaña de novato-- y, justo o no, se le empezará a etiquetar como proclive a las lesiones.


Kirk Cousins, quarterback, Atlanta Falcons

A diferencia de Burrow, Kirk Cousins había logrado mantenerse sano durante la mayor parte de una carrera que ya está por comenzar su decimotercera temporada... hasta que sufrió una rotura de tendón de Aquiles en la Semana 8 de la campaña pasada. Típicamente, se trata de una lesión que llevaba hasta un año para recuperarse, pero casos recientes --incluyendo el de Aaron Rodgers-- han demostrado que se puede regresar en un plazo mucho menor.

Por ahora, Cousins ya participó en las actividades organizadas de equipo, y tiene confianza plena en estar listo para el arranque de la campaña regular, a pesar de que sufrió su lesión dos meses después que Rodgers. Pero, los Falcons crearon un drama innecesario durante el Draft 2024 del pasado mes de abril, cuando pagaron la octava selección global por el quarterback Michael Penix Jr. de Washington.

Por sí sola, la selección de Penix no sorprende demasiado para un club que acumula, de a poco, estelares ofensivos jóvenes con nombres como Drake London, Kyle Pitts y Bijan Robinson. Pero, la elección de Penix llegó semanas después de que Atlanta comprometió 180 millones de dólares a lo largo de cuatro años para Cousins, incluyendo 100 millones garantizados. Solo en este año, Cousins se embolsará 62.5 millones de dólares, entre el bono por firmar y el salario base de la campaña.

Atlanta creó, así, una situación en la que Cousins lleva las de perder si salta al campo sin estar completamente listo físicamente, o si no se acopla rápidamente al sistema ofensivo de los Falcons, porque los fanáticos no esperarán mucho antes de pedir a Penix en el campo de juego si eso sucede.

Una pizca de drama adicional se agregó este jueves cuando la liga penalizó a los Falcons con la perdida de una selección de draft de quinta vuelta del 2025, y multas para la organización y para el gerente general Terry Fontenot, por contactar a Cousins y a otro par de jugadores en la agencia libre antes del periodo permitido.


Anthony Richardson, quarterback, Indianapolis Colts

Indy sorprendió la temporada pasada, alineando desde la Semana 1 a Richardson, su recluta de primera ronda, como quarterback titular. Richardson, elegido cuarto global en el draft del año pasado, era ampliamente considerado un prospecto a desarrollar al que, probablemente, le vendría bien esperar un tiempo en la banca antes de ser lanzado a los lobos.

Richardson solo inició cuatro partidos en las primeras cinco jornadas. Primero, se perdió el juego de la Semana 3 por una conmoción cerebral, y luego vino un esguince de la articulación acromioclavicular en el hombro de lanzar que requirió cirugía.

Los Colts terminaron la temporada pasada con un muy respetable 9-8, quedándose a una derrota en la Semana 17 frente a los Houston Texans de coronarse en la AFC Sur y meterse a los playoffs. La creencia en Indy es que hay talento para competir en los playoffs, si hay consistencia en la posición de quarterback.

La presión está sobre Richardson, quien no solamente no ha demostrado que valía la cuarta selección global del Draft 2023 de la NFL, sino que ahora debe empezar su segunda campaña después de un largo periodo de inactividad y rehabilitación, con altas expectativas, y poco tiempo jugando con las armas que le rodean.


Dre Greenlaw, linebacker, San Francisco 49ers

Objetivamente hablando, no hubo un peor momento en el Super Bowl LVIII de febrero pasado, que cuando Greenlaw se rompió el tendón de Aquiles de una manera incomprensible mientras entraba al campo en la primera mitad.

Junto a Fred Warner, Greenlaw conforma la mejor pareja de linebackers en la liga. Para los 49ers, además de lo que aporta sobre el campo, hay que mencionar que desempeña un rol de liderazgo para una unidad de la que se espera ver siempre entre las mejores de la NFL.

El momento de la lesión de Greenlaw, apenas hace unos cuatro meses, y su subsecuente cirugía, invitan a pensar que no estará listo para el arranque de campaña. Esa es una muy mala noticia para una defensiva de San Francisco que sufrirán un recambio masivo en las trincheras, habiéndose despedido de Arik Armstead, Randy Gregory, Chase Young, Clelin Ferrell y Javon Kinlaw, sin mencionar el cambio de coordinador defensivo, pasando de Steve Wilks a Nick Sorensen.

Por si fuera poco, el safety estelar Talanoa Hufanga también podría perderse el inicio de la temporada regular, como Greenlaw, debido a una rotura de ligamento anterior cruzado sufrida en la temporada pasada. Los Niners requieren de la calidad de Greenlaw, y Hufanga, para ayudar al acoplamiento de nombres como Maliek Collins, Leonard Floyd y los demás rostros nuevos en un año de transición a este lado de balón.

Y, sin Greenlaw acompañando a Warner en el corazón de la unidad, la defensiva de los Niners no alcanzará todo su potencial.


Mark Andrews, ala cerrada, Baltimore Ravens

Desde su temporada de novato, Andrews se convirtió en el blanco más confiable para Lamar Jackson en el juego aéreo de los Ravens. Un recluta de tercera ronda que se ha metido a la élite de la NFL en poco tiempo, su ausencia fue resentida por Baltimore el año pasado, a pesar de que el equipo culminó con el primer sitio en la siembra de la AFC.

Jackson obtuvo su segundo premio a Jugador Más Valioso de la NFL, pero solo lanzó 24 pases de touchdown, un total bajo para quarterbacks que suelen quedarse con el codiciado galardón.

Andrews --quien aplaudió el veto de la liga a las tacleadas colgándose de la cadera-- quedó fuera de acción durante la mayor parte de la pasada campaña, tras sufrir una fractura de tobillo en uno de esos derribos, cortesía de Logan Wilson de los Bengals.

Andrews consiguió regresar a tiempo para el duelo de Campeonato de la AFC donde cayó Baltimore ante los Kansas City Chiefs, por 17-10, pero claramente no estaba recuperado, atrapando solo dos envíos para 15 yardas en el encuentro.

Ahora, con todo el tiempo que ha transcurrido desde ese tropiezo del 28 de enero a la fecha, Andrews debe estar de regreso al 100 por ciento cuando los Ravens vuelvan a saltar al campo en un partido significativo. Como el resto de la ofensiva, y de la plantilla en general, Andrews tiene que demostrar que Baltimore puede hacer más que solo ganar en campaña regular, y que puede sortear el último obstáculo para que la franquicia regrese a un Super Bowl.


Trevon Diggs, esquinero, Dallas Cowboys

En ausencia de Diggs, quien se rompió el ligamento anterior cruzado de una rodilla durante un entrenamiento en septiembre del año pasado, DaRon Bland se convirtió en una estrella en ascenso para Dallas, liderando a la liga con nueve intercepciones, de las cuales devolvió cinco hasta las diagonales.

Diggs deberá estar de regreso a tiempo para el campamento de entrenamiento de los Cowboys, con lo que la franquicia de Jerry Jones perfila alinear a dos de los últimos tres líderes de la NFL en intercepciones (Diggs lo hizo en el 2021 con 11) en sus esquinas.

Pero, Dallas reestrena coordinador defensivo en la persona de Mike Zimmer, quien vuelve a los Cowboys después de que Dan Quinn, arquitecto de las dominantes unidades de las recientes campañas, emigrara para tomar el puesto de entrenador en jefe de los Washington Commanders.

Diggs, por naturaleza, asume muchos riesgos en la cobertura, y hay que ver cómo siente la rodilla después de una prolongada rehabilitación, a la hora de realizar cortes y redireccionar hacia el ovoide. No existe garantía de que esté listo a tiempo para el arranque del campamento de entrenamiento.

La defensiva de Dallas pasa por un periodo de transición, y será crucial que haya confianza en que las esquinas estarán bien cubiertas. Diggs necesitará regresar en buena forma, y al mismo tiempo, recortar su número de errores, algo que parece contraintuitivo a su estilo de juego.


Josh Jacobs, corredor, Las Vegas Raiders

El líder corredor de la NFL en la campaña del 2022 (1,653 yardas) consiguió sumar menos de la mitad de eso en el 2023, una temporada en la que se perdió los cuatro partidos finales por un problema de cuádriceps.

Por si fuera poco, incluso en los partidos que sí disputo, Jacobs decepcionó. Promedió apenas 3.45 yardas por acarreo, y sus touchdowns terrestres quedaron recortados de 12 a seis del 2022 al 2023.

Quizás, el hecho de que estaba en año de contrato influyó para que Jacobs no regresara para cerrar la campaña pasada con Las Vegas, prefiriendo descansar y no forzar un regreso que pusiera un riesgo su llegada a la agencia libre.

Pero, todas las miradas estarán puestas en Jacobs cuando debute con los Packers, no solamente porque recibió un contrato de cuatro años y 48 millones de dólares inesperado en un mercado en recesión para la posición, sino que Green Bay prefirió apostar a Jacobs que retener a su propio estelar, Aaron Jones, de quien la directiva de la franquicia ya había mencionado que entraba a planes futuros.

Esa aparente traición de la gerencia a Jones, para sumar a Jacobs, tiene menos sentido cuando se escucha cómo el head coach Matt Lafleur elogió a Jones por su papel en la recta final de la temporada regular y playoffs para los Packers. Encima de todo, Jacobs, con tres años menos que Jones, acumula 128 acarreos menos en la NFL, lo que indica un desgaste mayor para el producto de Alabama.

Si Jacobs no recupera su forma del 2022 rápidamente en Green Bay, la gente le hará saber lo que piensa, de manera inequívoca, acerca de que haya reemplazado a uno de los favoritos de la afición.


Nick Chubb, corredor, Cleveland Browns

La lesión dramática que sufrió Chubb en el segundo partido de la campaña realmente nos rompió el corazón. No solamente le robó la temporada a uno de los mejores corredores de la NFL, sino hizo recordar una lesión similarmente grotesca sufrida en sus tiempos colegiales con la Universidad de Georgia.

Necesitó, esta vez, cirugía para reparar el ligamento medial colateral y el menisco, y posteriormente otra intervención para reparar el ligamento anterior cruzado de la rodilla izquierda.

Chubb aún no regresa al campo de prácticas, aunque se ha mantenido dentro del complejo durante casi todo el tiempo de su rehabilitación. La experiencia previa de haber pasado por algo similar en Georgia le brinda una idea clara de cómo debe llevar el proceso, y la paciencia que requiere para regresar.

La expectativa en Cleveland es que estará listo para jugar en algún punto de la temporada del 2024, pero a sus 28 años de edad, se acerca a la edad donde los corredores típicamente empiezan a perder efectividad en la NFL, sin mencionar cuánto han podido recortar de su vida útil las mencionadas lesiones.

Chubb sufrió la lesión con cuatro invitaciones al Pro Bowl consecutivas en las temporadas previas. En el 2022, rebasó por primera ocasión la marca de los 300 acarreos. Quizás, esperar que retome de golpe ese nivel sería demasiado optimista, pero con lo poco que ha hecho Deshaun Watson en Cleveland, es crucial que los Browns cuenten con un ataque terrestre confiable.