Como muchos hijos de mexicanos en Estados Unidos, su primera pasión fue el fútbol soccer, pero el americano le ofreció un futuro en la universidad
Abraham Montaño, ex pateador de los New Mexico State Aggies, fue invitado al minicampamento para novatos de los New York Giants que se llevará a cabo en los primeros días de mayo, con la oportunidad de sorprender a su nuevo coach y ganarse un lugar en el equipo.
Abraham Montaño, nació en Salinas, California, pero sus padres son de Jalisco, cerca de la laguna de Chapala, “toda la vida me la pasé allá, cada año íbamos, mi papá agarraba la ‘troca’ y salíamos toda la familia” recuerda Abraham. “Aunque no nací allá yo siempre me he sentido mexicano, 100% mexicano” remarcó el pateador.
Cómo muchos hijos de mexicanos en Estados Unidos, su primera pasión fue el fútbol, en particular para la familia Montaño, las Chivas. “Recuerdo ver de chico con mi papá los partidos del Guadalajara, Omar Bravo, Oswaldo Sánchez, todas estas leyendas, Manuel Sol, Ramoncito Morales y a la Selección Mexicana con Chicharito y Rafa Márquez. A mí siempre me gustó usar el número ‘9’ por Omar Bravo”.
Abraham Montaño contó que su papá lo metió desde pequeños a él ya sus hermanos en el ‘soccer’, recuerda que inclusive odiaba el fútbol americano. Sin embargo, uno de sus coaches de la preparatoria que conocía desde pequeño, le recomendó que probara el fútbol americano para buscar una beca universitaria, y fue en su último año que probó ser pateador y pese a solo haberlo hecho durante seis meses, decidió decantarse por el fútbol americano al entrar al junior college y fue ahí donde tras un año y medio empezó a recibir ofertas de universidades de la División I de la NCAA.
Fresno State fue la primera parada de Abraham Montaño. Reclutado por Kalen DeBoer, el ahora head coach de Alabama, Abraham Montaño jugó cuatro partidos en su primera campaña tras la lesión de Cesar Silva, otro pateador de herencia mexicana, que apoyó al recién llegado Abraham Montaño hasta a el punto de explicarle cosas en español de lo que querían sus coaches.
En 2022, pese al cambio de staff de coacheo, Abraham Montaño se quedó con la titularidad, pero sufrió una lesión en el abdomen a media campaña. Durante su recuperación tuvo un desgarre en el abductor en su pierna con la que patea, sin embargo, cuándo finalmente estuvo sano, fue descartado por los coaches y al no jugar perdería la beca que tenía. Abraham Montaño tuvo un breve paso por San Diego State dónde no jugó, fue entonces cuando se consideraba retirado que llegó el llamado de New Mexico State.
“Yo estaba viviendo en San Diego, solo esperaba que se venciera mi contrato de alquiler, y una semana antes de irme me llamó New Mexico, ‘estamos desesperados por un pateador’, me dijeron. Me ofrecieron una beca completa. Manejé 10 horas de San Diego a Nuevo México y me enrolé en la universidad”.
Fue en New Mexico State, dónde Abraham Montaño brilló de mejor manera, convirtiendo la totalidad de los puntos extras que intentó y con un gran porcentaje en patadas de más de 40 yardas, acertando 5-7 de ese rango y 5-8 en patadas de más de 50 yardas.
Abraham Montaño destacó la confianza que le tuvieron sus coaches después de verlo convertir un gol de campo de 64 yardas. “En mi primer juego me dejaron intentar una patada de 51 yardas y la metí, sentí que algo se me cayó de los hombros, dije si la metí de aquí, la puedo meter de dónde sea, en New Mexico pasaba la media cancha y me dejaban patear de dónde fuera”.
“Yo no planeaba jugar profesional, pero por el buen año que tuve se me ha dado la oportunidad, llegaré con la mentalidad de que yo puedo y merezco estar ahí, quiero seguir demostrándolo al máximo nivel que ahora es la NFL”.