La primera sorpresa relacionada con Joey Bosa y su carrera de NFL fue haber salido tercero global en el orden de la primera ronda del draft, después de que circularan múltiples reportes en las horas previas al sorteo de que los San Diego Chargers tomarían al tackle ofensivo Ronnie Stanley de Notre Dame.
Mes y medio después las sorpresas no cesan, para Bosa ni para los Chargers.
Después de un minicampamento para novatos en el mes de mayo en que Bosa acaparó los reflectores en San Diego, llegaron las actividades organizadas del equipo, con la participación de los veteranos.
Para Bosa, fue la primera probada del siguiente nivel.
"Fue completamente diferente", explicó Bosa, de acuerdo al San Diego Union-Tribune. "Vas en contra de los monstruos allá afuera... el primer día no gané una repetición en presión al pasador, probablemente. Ahora, realmente estoy empezando a tomarle el modo. Mis movimientos regresan".
Sin embargo, las cosas fueron mejorando para el novato de 20 años de edad, lo que ha captado la atención de sus compañeros.
"Hizo un movimiento de giro sobre Joe Barksdale el otro día, y lo venció limpio como un silbato", admitió el ala defensiva Corey Liuget, de acuerdo al diario. "Tenía a Joe allá afuera molesto. El chico simplemente tiene talento, hombre. Yo no estaba haciendo eso como novato. No estaba ni cerca de hacer tantas jugadas como él está haciendo ahora.
Bosa y los Chargers arrancan su minicampamento obligatorio de tres días el próximo 14 de junio, antes de tomarse un tiempo libre previo al inicio del campamento de entrenamiento a finales de julio.