ASHBURN -- El ahora corredor de los Dallas Cowboys, Alfred Morris, anticipaba su salida de los Washington Redskins. No estaba contento, pero aceptaba lo inevitable. Lo que no deseaba era algo que anhelan tantos jugadores: la agencia libre.
"El proceso de la agencia libre fue muy insultante, por no decir más", explicó Morris en una llamada de conferencia con medios de Washington este miércoles. "No me gustó nada. No lo quiero hacer de nuevo".
El proceso resultó en que Morris firmara con el mayor rival de los Redskins, donde ahora es suplente para el novato Ezekiel Elliott. En el camino, Morris dijo que se cansó de escuchar a la gente criticar su productividad del 2015.
Las estadísticas de Morris bajaron respecto a la temporada pasada por una variedad de motivos. El bloqueo no fue preciso y los coaches dijeron, que pese a gustarles Morris, pensaron que no creó suficientes huecos para sí mismo. Sus seguidores dicen que sigue siendo efectivo. En cualquier caso, los números de Morris en Washington pasaron de una marca de franquicia con 1,613 yardas como novato en el 2012 a 751 la temporada pasada. Y sus yardas por acarreo cayeron de 4.8 como novato a 3.7 la campaña pasada.
Los Redskins no hicieron un esfuerzo por retenerlo.
"Para el final del año, imaginé que mi tiempo allí se había ido", dijo Morris, un recluta de sexta ronda del entonces entrenador en jefe Mike Shanahan en el 2012. "No eres el elegido del coach, no eres el elegido del gerente general, ellos reclutan a un chico nuevo. Es un negocio, así que esperaba eso. Ellos simplemente tenían un plan diferente y yo no era parte de eso y está bien.
"No puedo llorar por leche derramada. Simplemente tenía que salir a comprarme otro galón".
Pero la agencia libre no estuvo bien.
"Fue una experiencia loca simplemente debido a la temporada pasada y todos diciendo que mi producción había bajado, mucha gente tiró en contra mía y trataron de decir, 'Ey, no fue tan bueno'", señaló Morris, quien eventualmente firmó un acuerdo por dos campañas y hasta 5.5 millones de dólares.
Dijo que los Miami Dolphins y Denver Broncos hablaron con él al inicio de la agencia libre, pero que tenían mayores prioridades que firmar a un corredor. Así que ellos gastaron su dinero en otros lados. La búsqueda de Morris por una nueva casa tomó más de lo anticipado.
"Fue como, vaya, no esperaba que fuera así", dijo Morris. "Eventualmente, Dallas llegó tocando. Hice una visita y me pareció buen acomodo. Así que dije, '¿Por qué no?'. Es un equipo rival, pero ni siquiera pensé en eso. Sólo era un chico tratando de mantener vivo su sueño y sucede que ocurrió con un equipo rival".
Morris dijo que los consejos de otros veteranos le ayudaron. Morris dijo que cuando fue novato, jugadores como DeAngelo Hall y Santana Moss ayudaron a sacudir la noción idealista de la NFL fuera de su cabeza. Le remarcaron el aspecto de negocios. Se le recordó de la pasada temporada baja, una que no desea repetir.
"Pero debes recordar no dejar que te roben la alegría", subrayó Morris. "Todavía tengo la oportunidad de vivir mis sueños. ¿Va a salir del modo en que lo quiero? No, pero está bien porque sigo aquí. Hay millones de personas que quisieran estar en nuestros zapatos. Así que me mantuvo centrado. Sabía que si no era allí, habría más oportunidades, y sucede que caí en Dallas. Veremos cómo resulta a lo largo del tiempo".