Ezekiel Elliott, corredor de los Dallas Cowboys, dijo la noche del viernes sentirse decepcionado por la decisión de la NFL de suspenderlo seis juegos por violar la política de conducta personal.
El corredor también se disculpó por la distracción que el tema extra deportivo ha provocado.
En un mensaje en Twitter, Elliott también señaló que trabajará para madurar en su actuar fuera del campo y aprovechar la oportunidad que se le ha dado de jugar en la NFL.
— Ezekiel Elliott (@EzekielElliott) 12 de agosto de 2017
La suspensión viene como resultado de una investigación que comenzó hace más de un año luego que una ex novia acusara a Elliott de violencia doméstica en Columbus, Ohio. La Oficina del Fiscal de Distrito de la Ciudad de Columbus anunció en septiembre que no radicaría cargos contra Elliott porque hay "información conlifctiva e inconsistente" sobre el caso, pero la NFL puede penalizar a un jugador aún ante la ausencia de cargos criminales radicados.
Los Cowboys aún no se pronuncian públicamente sobre la suspensión, la cual fue anunciada el viernes. El dueño y gerente general del equipo, Jerry Jones, ha defendido a Elliott durante la investigación y una fuente le informó a Adam Schefter, de ESPN, que Jones éstá furioso con la decisión de la NFL.
Se espera que Elliott apele la suspensión, fuentes de la liga dijeron a Schefter.
Elliott tendrá tres días laborales para radicar una notificación de apelación y una vista tiene que ser pautada entre los primeros 10 días de que se reciba dicha notificación, según el Artículo 46 del convenio colectivo, el cual gobierna las acciones disciplinarias impuestas por el comisionado Roger Goodell.
La apelación es vista por el comisionado o su designado, usualmente el ejecutivo de la NFL Harold Henderson.
Las autoridades del orden público concluyeron que la persona que acusa a Elliott no era creíble y rechazaron radicar cargos. Varios testigos, incluyendo algunos cercanos al caso, escucharon a la mujer gritarle a Elliott y decir que ella “arruinará tu carrera” en reacción a que Elliott le indicara que no interesaba continuar con su relación.
La suspensión de la liga a Elliott es diferente a la que le impuso en el 2014 al entonces running back de los Baltimore Ravens, Ray Rice, quien sí enfrentó cargos y luego llegó a un acuerdo con la fiscalía tras una investigación por las autoridades.
La NFL cree que investigó el caso de Elliott de manera completa y que en esencia Elliott violó la polítca de conducta personal. La liga investigó mensajes de texto y retuvo los servicios de expertos en medicina y expertos legales que ayudaron a Goodell a tomar una decisión.
Antes de disciplinar a Elliott, la NFL también consideró otras alegaciones de violencia doméstica en febrero y julio de 2016, al igual que un incidente el pasado mes de febrero en el cual Elliott le haló la falda a una mujer, aunque estos incidentes no fueron factores en la decisión de la disciplina. Además, antes que el equipo partiera hacia el campamento de entrenamiento, Elliott estuvo alegadamente envuelto en un incidente en una barra en Dallas que dejó a un hombre con una lesión en la nariz.
La policía de Dallas, sin embargo, suspendió su investigación del incidente porque no pudieron contactar a la víctima y ningún testigo ofreció una versión de los hechos.
El dueño y gerente general de los Cowboys, Jerry Jones, ha defendido a Elliott a través de la investigación.
“Yo he revisado todo, y no hay absolutamente nada – ni una cosa – que tenga que ver con violencia doméstica”, dijo Jones durante la primera conferencia de prensa de los Cowboys en Oxnard.