GREEN BAY, Wis. -- Clay Matthews reconoció su responsabilidad por su castigo por rudeza al pasador que casi le cuesta la victoria a los Packers en la Semana 1 sobre los Chicago Bears.
Sin embargo, el linebacker de los Packers no se sintió de la misma forma una semana después, luego de ser castigado otra vez en una jugada que anuló la intercepción que potencialmente le hubiera dado a Green Bay la victoria en el duelo que finalmente quedó empatado 29-29 ante los Minnesota Vikings.
Matthews fue castigado por un golpe a Kirk Cousins, cuyo pase profundo fue intercpetado por el novato Jaire Alexander –jugada que le hubiera dado a Aaron Rodgers y a su ataque el balón con 1:37 por jugar y con la ventaja de 29-21 en el marcador.
Tras el pañuelo, Cousins terminó era serie con un pase de touchdown de seis yardas y la conversión de dos puntos a Adam Thielen con 31 segundos en el tiempo regular.
“Tengo muchas emociones sobre lo terrible que fue ese castigo. Al mismo tiempo, no sé qué más hacer. No lo sé. Ustedes díganme”, dijo un visibilemente pesadumbrado Matthews tras el partido. “¿Lo presioné (a Cousins)? Creo que lo golpeé dentro del área de la cintura y el pecho, hice mi cabeza a un lado, puse mis brazos abajo. Marcar eso como castigo en ese momento del partido es increíble.
“La semana pasada, está bien. Tuve la culpa. Esta semana, increíble. Lo peor es que probablemente mandemos la queja y, ¿saben qué dirán? Encontrarán la falta en mi acción porque van a estar de acuerdo con los réferis. Es una acción difícil. Ya vieron cómo cambió el juego”, agregó.
“Sé que hay énfasis en proteger a los quarterbacks, pero esto ya se salió de control. No sé qué más hacer. Es frustrante, porque la intercepción de Jaire era la victoria para nosotros, ¿no? En lugar, (los Vikings) anotan, tiempo extra, esto y lo otro.
“Tuvimos oportunidades para ganar, sin duda, pero es frustrante permitir que un castigo en una jugada en la que siento que hice lo correcto haya influido en el resultado. Intento no decir nada, pero, obviamente, no estoy de acuerdo con este castigo”, recalcó Matthews.
El réferi Tony Corrente explicó a ESPN lo que vio.
“Cuando (Matthews) golpea al quarterback, lo levanta del piso y lo lleva al piso”, dijo Corrente, quien agregó que el castigo no se marcó bajo las nuevas reglas establecidas para la actual temporada.
“Para nada. No tiene nada que ver con la regla del peso del cuerpo. No tiene nada que ver con la regla del casco con casco. (Clay) levantó al quarterback y lo azotó en el piso”, insistió el réferi.
Cuando se le preguntó a Corrente qué debió haber hecho Matthews, Corrente dijo: “No levantar al quarterback ni azotarlo al piso”.
Matthews dijo que no le explicaron el castigo en el campo y tampoco la conocía cuando habló con los reporteros, pues el reporte de los oficiales estaba en proceso de forma simultánea.
“Sé que decir, pero no quiero perder dinero”, dijo Matthews. “Veré el video, ver si hay algo que pueda cambiar, pero me siento muy bien sobre ese golpe”.
Matthews no fue multado por el golpe que dio en el cuarto periodo al quarterback de los Bears, Mitchell Trubisky, la semana pasada. La acción fue en una cuarta oportunidad en la última serie ofensiva de Chicago. Más tarde en ese ataque, el linebacker de los Packers, Nick Perry, terminó la ofensiva con una captura en otra cuarta oportunidad.
Mientras Mike McCarthy, coach de los Packers, no quiso discutir el castigo sobre Matthews, el entrenador en jefe de los Vikings, Mike Zimmer, opinó sobre el énfasis a los golpes a los quarterbacks.
“Es muy difícil. Tienes un área permitida para golpear del tamaño de la zona de strike y no puedes caer sobre ellos y luego, no puedes golpearlos en las rodillas ni tampoco abajo ni golpearlos en la cabeza. Tienes que golpearlos en la zona de strike y sin caer sobre ellos”, recalcó.