¿Por dónde comenzar?
Hay jornadas en donde nos cuesta trabajo rescatar un puñado de actuaciones individuales dignas de este espacio. También, hay jornadas en donde nos preocupamos por asegurarnos de que quepan todos. La Semana 5 fue una de éstas últimas, con los receptores llevándose una buena porción de la atención. Eso sí, fue un quarterback el que se llevó el sitio de honor:
DESHAUN WATSON, QB, HOUSTON TEXANS
Se suponía que Dan Quinn, un entrenador en jefe de corte defensivo, iba a ser capaz de arreglar los graves problemas de sus Falcons a ese lado del balón, una vez que regresaran todos los lesionados del 2018. Quinn despidió a su coordinador defensivo del año pasado, Marquand Manuel, y asumió el control de la unidad.
Le tomó solamente cuatro periodos a Watson, el quarterback de tercer año de Houston, acabar con todos esos buenos deseos.
Completando 28 de 33 intentos de pase para 426 yardas --el segundo mayor total de la jornada-- con cinco pases de anotación sin intercepciones, y un índice de pasador perfecto, Watson se convirtió en el Coloso de la Semana 5.
De acuerdo a ESPN Stats & Information, Watson se convirtió en apenas el tercer quarterback en la historia de la liga con al menos 400 yardas por aire, cinco touchdowns, y un índice de pasador perfecto, uniéndose a lo logrado por Nick Foles en el 2013 y Jared Goff el año pasado.
Curiosamente, Watson rompió un empate que tenía con Patrick Mahomes por la mayor cantidad de partidos con cinco pases de touchdown desde el 2017, siendo el de esta jornada su tercero. Mahomes y los Kansas City Chiefs son los rivales de Watson y los Texans para la siguiente jornada.
Finalmente, vale la pena mencionar que tres de sus cinco envíos de touchdown fueron para un compañero que aparece más abajo, y que Watson también hizo daño por tierra, con 47 yardas en cuatro acarreos en la paliza por 53-32 a los Falcons.
MENCIONES HONORÍFICAS
DJ Chark, WR, Jacksonville Jaguars. La Minshew-Manía ha tomado a Jacksonville por sorpresa, pero es de notar que Chark se ha convertido en el socio ideal del colorido quarterback novato. Incluso en la derrota de esta tarde, por 34-27 ante los Panthers, Chark brilló con ocho atrapadas para 164 yardas y dos anotaciones. Gardner Minshew II recibe la publicidad, pero no lo ha hecho solo en Jacksonville.
Amari Cooper, WR, Dallas Cowboys. Once recepciones para 226 yardas y un touchdown pusieron a Cooper en el mapa entre los más destacado de la visita de los Packers a Dallas, pero lamentablemente para los seguidores de los Cowboys, no fueron suficientes para entregarle la victoria a los suyos. Con su actuación de hoy, según ESPN Stats & Info, Cooper se convirtió en el primer jugador en la historia de la franquicia en sumar más de un partido con al menos 200 yardas en recepciones.
Will Fuller V, WR, Houston Texans. Watson estuvo repartiendo, y Fuller estaba recibiendo... más que nadie. El receptor abierto de los Texans impuso nueva marca personal con 14 recepciones para 217 yardas, y empató una marca de la franquicia con tres touchdowns en su mejor actuación como profesional, de acuerdo a información de ESPN Stats & Info.
Chris Godwin, WR, Tampa Bay Buccaneers. ¿Será que vamos a empezar a ver a Godwin en este espacio todas las semanas? Una de las gratas revelaciones del año, el receptor abierto de los Bucs se hizo de siete recepciones para 125 yardas y dos touchdowns en la que terminó siendo derrota de Tampa Bay ante los Saints, por 31-24. Los Buccaneers todavía tienen mucho por trabajar a la ofensiva, pero al menos parece que pueden contar con la consistencia de Godwin.
Josh Jacobs, RB, Oakland Raiders. Europa le sentó muy bien a Jacobs. El corredor novato de Oakland le pasó por encima a una dura defensiva de los Chicago Bears con un desempeño que consistió en 26 acarreos para 123 yardas y dos anotaciones en la victoria por 24-21 de los Raiders en Londres. Jacobs no había anotado desde la Semana 1, cuando también tuvo dos visitas a las diagonales.
Aaron Jones, RB, Green Bay Packers. Todo mundo sabía que Aaron iba a dominar este partido, con números increíbles. Simplemente, no sabíamos cuál Aaron sería. En su visita al Super Rancho de Jerry Jones, fue Jones y no Rodgers el que acabó con Dallas, corriendo el balón 19 veces para 107 yardas y cuatro anotaciones, liderando además a Green Bay por tierra en ausencia de Davante Adams, con siete recepciones para 75 yardas en la victoria por 34-24. Sus cuatro touchdowns empatan la marca de la franquicia por mayor cantidad de anotaciones por tierra en un juego, según ESPN Stats & Information, igualándolo con nombres como Dorsey Levens, Terdell Middleton y el inmortal Jim Taylor, quien lo hiciera tres veces.
Christian McCaffrey, RB, Carolina Panthers. Cuesta trabajo pensar en un corredor más explosivo en todas las facetas del juego que McCaffrey. El corredor de tercer año corrió el ovoide 19 veces para 176 yardas y dos touchdowns, atrapó seis pases para 61 yardas y otro touchdown, y hasta intentó un pase, que al final fue incompleto, en la victoria de Carolina sobre los Jags. Uno de sus touchdowns, una escapada de 84 yardas, le da su segunda anotación de 70 yardas o más en lo que va de la actual temporada de los Panthers.
Adam Thielen, WR, Minnesota Vikings. Stefon Diggs está insatisfecho con su papel en la ofensiva de los Vikes, pero al menos el equipo no se ha olvidado de Thielen, quien atrapó siete balones para 130 yardas y dos touchdowns, apenas segunda vez en su carrera que anota dos veces en recepciones, en el triunfo de los Vikings sobre los New York Giants, por 28-10.
MIchael Thomas, WR, New Orleans Saints. Otro de los jugadores que escribió un capítulo importante en los récords de su franquicia fue Thomas, quien con su domingo de 11 recepciones para 182 yardas y dos anotaciones frente a Tampa Bay dejó atrás a Joe Horn y Marques Colston por la mayor cantidad de partidos con al menos 150 yardas y 10 recepciones en la historia de los Saints, de acuerdo a datos de ESPN Stats & Information.