El nuevo linebacker interno de los New York Giants, Blake Martinez, experimentó el aprendizaje remoto por primera vez durante su época en la Universidad de Stanford. Y le dará uso con su nuevo equipo.
Al igual que muchos de nosotros, Martínez permanece cerca de su casa mientras la pandemia de coronavirus avanza indiscriminadamente por todo el mundo.
Normalmente, el jugador de 26 años estaría preparándose para integrarse a los Giants para su programa de pretemporada. Ahora se desconoce cuándo sucederá eso.
Desde que acordó y firmó un contrato por tres años y 30 millones de dólares en la agencia libre, el ex linebacker de los Green Bay Packers no ha tenido la oportunidad de hacer muchas cosas. Ayudó a su papá con los toques finales de un gimnasio en el sótano de su casa de Tucson, Arizona. Fue ahí que firmó su nuevo contrato.
La conferencia telefónica del lunes fue su primera interacción con la prensa de New York desde que concretó su pacto hace dos semanas. Ha hablado con su nuevo head coach, Joe Judge, en un par de ocasiones, retomó su amistad con el ex asistente de los Packers y actual coordinador defensivo de los Giants, Pat Graham, y ha tenido comunicación con el coach de linebackers internos, Kevin Sherrer.
Eso es todo. Martínez no conoce a sus nuevos compañeros. Se suponía que lo haría el 6 de abril, cuando comenzaría el programa de pretemporada.
La NFL no ha reprogramado esa fecha, ni tampoco ninguna otra actividad.
Los Giants le enviaron un iPad con grabaciones de sus juegos de la campaña anterior, en la que terminaron con récord de 4-12. No tiene idea de cuándo recibirá el nuevo libro de jugadas. Eso ocurre generalmente al inicio de los entrenamientos de pretemporada, por lo que es una situación aún más complicada para un jugador que cambia de equipo.
“Estoy en el limbo en este momento”, dijo Martinez. “Entrenando y esperando el siguiente paso en el protocolo del virus para saber que se nos permite hacer, ya sea reunirse con los coaches y esas cosas, y tratar de aprender lo más posible.
“Una vez que reciba el libro de jugadas será el punto de partida para tomar apuntes y hacer las cosas necesarias para aprenderme las jugadas, los ajustes y todo lo demás”, declaró Martinez, quien fue segundo en la NFL la campaña pasada con 155 tacleadas.
El concepto de aprendizaje remoto no asusta a Martinez. En la universidad había momentos en los que utilizaban conferencias telefónicas y lecciones por internet tanto en el aspecto académico como deportivo. Salió de Stanford en 2015.
“Tengo idea de cómo sobrevivir a eso”, declaró. “Es raro no estar en la misma aula y conocerse de esa forma. Pero es algo que debemos aprovechar al máximo y será interesante”.
La mayor desventaja, según Martinez, a este tipo de educación es que el aprendizaje en grupo es parte de la camaradería. Será difícil establecerla a través de internet.