Si los Dallas Cowboys consiguen ser exitosos en la campaña del 2020 de la NFL, será porque no solamente los estelares determinan cuán lejos puede llegar el equipo en la primera campaña del head coach Mike McCarthy.
Los Cowboys son liderados por nombres familiares en el quarterback Dak Prescott, corredor Ezekiel Elliott, receptor abierto Amari Cooper, linebackers DeMarcus Lawrence, Jaylon Smith, Leighton Vander Esch y Sean Lee, linieros ofensivos Zack Martin y Tyron Smith y el liniero defensivo Gerald McCoy, entre ellos.
Pero, sea como sea que definan el éxito --un viaje al Super Bowl o un boleto a los playoffs-- será determinado por los jugadores de los Cowboys que no saltan de inmediato a la mente.
Los 10 totales más altos contra el tope salarial de los Cowboys para el 2020 totalizan 131.175 millones de dólares. Ese es el cuarto mayor total para los 10 jugadores mejor pagados de cada equipo en la liga, de acuerdo a ESPN Stats & Information. Los Indianapolis Colts (142.65 millones de dólares), Kansas City Chiefs (142.29 millones) y Tampa Bay Buccaneers (134.8 millones) son los primeros tres.
Los Colts sumaron al quarterback Philip Rivers y al tackle defensivo DeForest Buckner en el receso de temporada. Los Buccaneers incorporaron al quarterback Tom Brady. Y los Chiefs son los campeones defensores del Super Bowl.
La base de un equipo es el núcleo de su plantilla.
Más allá de los nombres reconocibles arriba, echemos un vistazo a algunos jugadores menos conocidos que requieren que necesitan dar el siguiente paso para que los Cowboys sean amenaza en postemporada en el 2020.
Tyrone Crawford: el liniero defensivo ha sido criticado a menudo afuera del equipo, sobre todo por la extensión de cinco años que firmó en el 2015. Pero, dentro del equipo, Crawford es altamente valorado. Luego de someterse a una doble cirugía de cadera, se perdió 12 encuentros la temporada pasada. Su valor sobre el campo es su habilidad para jugar múltiples posiciones, lo que puede afectar sus estadísticas, pero ayuda a los demás. En el vestidor, Crawford es una influencia estable con sus compañeros. Para la temporada del 2020, parece estar sano y ayudará en el puesto de ala defensiva derecha en alineaciones de personal base, para mudarse al interior en jugadas de pase.
Jourdan Lewis, Anthony Brown y Chidobe Awuzie: son los esquineros que se mantienen en el equipo desde las últimas campañas, y deberán producir más en el 2020. La producción de Lewis por jugada ha sido decente, y se puede hacer un argumento de que necesita jugar más. Lewis también fue segundo en el equipo en capturas para la defensiva, luego de sumar cuatro en el 2019. La campaña de Brown se vio cortada por un desgarro en el tríceps, pero vuelve a los Cowboys mediante acuerdo de tres años. Awuzie, quien suma tres intercepciones en tres años, ha pasado de ponerse en posición para hacer jugadas, a hacer las jugadas. Con más coberturas y técnicas diferentes empleadas por el coordinador Mike Nolan, Awuzie debe dar el salto para que mejore la defensiva.
Joe Looney, Connor McGovern y Connor Williams: son los tres linieros ofensivos que son candidatos principales para reemplazar al centro retirado Travis Frederick. El novato de cuarta ronda, Tyler Biadasz, podría integrarse al grupo, pero con tan poco tiempo de práctica, el impacto de muchos novatos se verá afectado. Looney posee la experiencia e inició los 16 juegos en ausencia de Frederick durante la temporada del 2018. Hizo el trabajo suficientemente bien y consigue comunicarse con el resto de la línea. McGovern no jugó como novato por una lesión en un músculo pectoral. McGovern alineó como centro en Penn State y los Cowboys lo seleccionaron en la tercera ronda del 2019 por su flexibilidad posicional. Su inteligencia y juego físico fueron consideradas cualidades positivas. Williams regresa de una rotura de ligamento anterior cruzado y nunca ha alineado como centro, pero hay quienes creen que podría ser su mejor posición. Los "perdedores" en la batalla por el puesto de centro tendrán la posibilidad de pelear por el puesto de guardia izquierdo.
Blake Jarwin: al entregar al ala cerrada una extensión de 22 millones de dólares, los Cowboys claramente creen que está listo para reemplazar al veterano Jason Witten. Jarwin realizó jugadas grandes como pieza secundaria en la ofensiva, pero las cosas cambian cuando te conviertes en el jugador principal. El crecimiento de Jarwin no tendrá que ver con su habilidad para hacer jugadas por las costuras, sino qué podrá hacer en una tercera y 6 crítica donde sea necesario mover las cadenas, o cómo bloqueé en el punto de ataque. Por ahora, Jarwin sigue siendo una especie de proyección.
Xavier Woods: el safety Ha Ha Clinton-Dix es el mayor nombre que se integra a la defensiva secundaria de los Cowboys. Clinton-Dix jugó para McCarthy en Green Bay, y ha mostrado la habilidad de robar el ovoide. Woods está por comenzar su tercera campaña como safety titular de tiempo completo, y va montado sobre una trayectoria favorable. la consistencia en su juego será clave. Woods sabe dar duros golpes, y por momentos ha mostrado la habilidad de robar el balón, pero necesita tener mayor impacto en cada partido. Como los mencionados esquineros, debe verse ayudado por el empleo de Nolan de más coberturas, y el modo en que disfraza dichas coberturas.