La disponibilidad ante medios de fin de temporada de Philadelphia dejó entrever las decisiones críticas que enfrenta a futuro el club
PHILADELPHIA -- Desde la multitud de preguntas respecto a la posibilidad de canjear a Carson Wentz, hasta las lágrimas en el rostro de Zach Ertz, la disponibilidad ante medios de final de temporada de los Philadelphia Eagles, celebrada este lunes, giró en torno a las decisiones críticas que enfrenta la franquicia en las semanas venideras.
El gerente general Howie Roseman y head coach Doug Pederson brindaron tonos positivos cuando se trató el tema de Wentz, quien todavía planea pedir ser canjeado en el receso de temporada porque su relación con Pederson está fracturada irremediablemente, dijeron fuentes a Chris Mortensen de ESPN.
Roseman no descartó por completo negociar a Wentz, señalando, "Eso es algo de lo que no estamos hablando nada en este momento". Enfatizó que han mostrado lo que sienten respecto a Wentz como persona y como jugador al reclutarlo segundo global en el draft del 2016, y después entregándole una extensión de contrato de cuatro años y 128 millones de dólares, tres temporadas más tarde.
"Cuando tienes a jugadores así, son como dedos en tus manos. Ni siquiera puedes imaginar que no sean parte de ti, que no estén aquí. Así es lo que sentimos respecto a Carson", dijo Roseman.
Wentz declinó charlar con los medios este lunes.
Pederson describió su relación con Wentz como "buena" y "bien" y "algo sobre lo que vamos a seguir construyendo, pronto".
"Sé que Carson está decepcionado. No es la clase de temporada que anticipó, y no es la clase de temporada que yo anticipe como head coach", dijo. "Hubo muchas partes en movimiento. No se trata de un tipo, aquí. Se requiere de todos nosotros, y es algo que hemos recalcado mucho aquí. Pero, al mismo tiempo, he sido contratado como head coach, he sido retado como head coach, y personalmente me he retado para corregir muchas cosas y corregirlo a él y asegurarme de que podemos seguir adelante con lo que hemos hecho en el mejor interés del equipo".
El buen amigo y socio de Wentz podría emigrar, también. Ertz se vio abrumado por las emociones durante su videoconferencia con reporteros el lunes, cuando se le preguntó cuál era su mensaje de despedida, si es que le tocaba moverse en el receso de temporada.
"Pienso que esta ciudad es la mejor para la cual jugar, y no podría haber pedido una mejor experiencia", dijo, limpiándose las lágrimas. "La ciudad significa mucho para mí, significa mucho para mi familia, y estoy agradecido".
Ertz, de 30 años de edad, lideró a Philadelphia en recepciones y yardas por recepción en cada una de las cuatro temporadas previas a una campaña repleta de lesiones, poco característica, en el 2020. Las charlas respecto a una extensión de contrato se cayeron en el pasado receso de temporada, dejando a Ertz cuestionándose si tenía cabida en los planes a largo plazo del equipo.
Mucho tiempo después de concluido el juego de domingo por la noche frente al Washington Football Team, Ertz, Wentz y el centro Jason Kelce, quien ha estado ponderando el retiro en el último par de años, se reunieron por más de hora en una de las bancas del Lincoln Financial Field, posiblemente intuyendo los cambios a la puerta.
Los Eagles actualmente tienen proyectado estar unos 73 millones de dólares por arriba del tope salarial del 2021. Hay un número de jugadores veteranos que no se espera estén de regreso con el equipo, Eso incluye al receptor abierto Alshon Jeffery y al tackle defensivo Malik Jackson, quienes accedieron a modificar sus acuerdos este lunes, dijeron fuentes a Jeremy Fowler de ESPN, obligando a los jugadores a acordar un nuevo convenio para el 2021 o ser cortados con el comienzo del nuevo año de la liga, en marzo.
La mayor decisión llega en la posición de quarterback. Los Eagles absorberían un cargo por dinero muerto de caso 35 millones de dólares en caso de canjear a Wentz, superando el cargo por dinero muerto de Brandin Cooks, de 21.8 millones de dólares con Los Angeles Rams, como el mayor en la historia de la NFL. Eso será evaluado junto con lo mejor para el equipo a largo plazo, y si traer de vuelta a Wentz y Jalen Hurts juntos es un escenario realista.
Cuando se le preguntó si aceptaría una competencia de quarterback en el 2021, Hurts respondió: "Soy un competidor. Controlo lo que puedo, pongo mi mejor esfuerzo en cualquier situación en la que estoy, para poder ser el mejor quarterback que puedo ser".