Otro que pegó duro en la cancha de Huracán. El volante central Iván Marcone, el capitán de Independiente, siguió en tono crítico contra el árbitro Pablo Dóvalo, como pasó con el técnico Carlos Tevez, después del empate 2-2 en la visita a Barracas Central, por la novena fecha de la Copa de la Liga. El jugador, que tenía tarjeta amarilla, se quejó por varios fallos, sobre todo una durísima patada en contra, y tras el partido fue expulsado por el juez.
Sin dudas, fue una noche caliente en Parque Patricios. En el estadio Tomás Adolfo Ducó, Independiente buscaba una victoria que lo volviera a ubicar como único puntero del Grupo A, pero igualó y se puso a la par de Instituto de Córdoba como líder de la zona. El encuentro finalizó con discusiones de futbolistas con Dóvalo por algunas acciones determinantes.
En su caso, Marcone había sido amonestado en los 90 minutos de tiempo reglamentario, pero siguió hablándole a Dóvalo, quien tras el encuentro tomó la decisión de mostrarle la tarjeta roja. Así, el experimentado mediocampista se enojó mucho más, ya que no podrá enfrentar el sábado a River Plate, en un partido muy importante en el Grupo A.
Tevez fue durísimo: "Ya sabíamos antes del partido que jugábamos contra 14, no ante 11. Ya se venía diciendo con Dóvalo y su accionar con Barracas Central... Es un ladrón, tenía que ir a mirar la mano en el VAR, como dos jugadas que pudimos tener penales a favor", afirmó.
Por su parte, Marcone siguió con el tono de lo dicho por su técnico: "El árbitro elige no tener las manos limpias. No está en nosotros poder solucionar esto, no depende de uno".
Ante la prensa, agregó firme: "No es tarea nuestro corregirlo, no hablo tampoco del técnico y los jugadores de Barracas. Esto debe arreglarlo la dirigencia del fútbol. Yo prefiero morir de pie, no vivir de rodillas como cierta gente, que prefiere estos beneficios".
Y fue más allá: "En nuestro club deben ver esto, en la previa, no después... Debieron reaccionar antes, decir que el arbitraje no era el correcto. Ya sabíamos que iba a pasar esto cuando lo designaron para el partido. Tampoco esperábamos tanto, un planchazo así, algo tan grave". Así sentenció el valioso hombre del mediocampo del Rojo, a quien le quedó una dura marca en la pierna derecha por la falta recibida por parte de Alexis Domínguez, a los 20 minutos del primer tiempo. Justamente, ese rival marcó el 2-1 parcial para Barracas Central, sobre el final de la primera mitad.
El juez le comentó a Marcone "no es roja", sobre la falta recibida. Y el jugador opinó de lo que le dijo Dóvalo a él: "¿Y qué me va a decir? No sabe qué decir, si no tiene explicación, ni sentido. Puede elegir seguir viviendo así, dirigiendo así. Nosotros somos los damnificados, ya nos perjudicaron como era previsible, pero ya está debemos mirar hacia adelante, corregir errores y seguir en el torneo. Pero bueno, esto me da mucha tristeza, Tevez nos advirtió y pasó esto. No quiso revisar algunas jugadas. Yo tampoco puedo parar el partido".
Así, Dóvalo sigue en el centro de las polémicas y casi todo Independiente lo puso como blanco de decisiones particulares. También fue señalado Luis Lobo Medina, el encargado de manejar el VAR en ese partido.