Hace 15 años, Esteban Paz buscó los brazos de su padre, Don Rodrigo, para festejar juntos el título de la Copa Libertadores del 2008, que Liga de Quito alcanzó aquella noche del 2 de julio de 2008, en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
Después de aquella gesta ante Fluminense, LDU será protagonista de otra final, esta vez de la CONMEBOL Sudamericana ante Fortaleza en Punta del Este, Uruguay.
Después de lograr la Libertadores en el 2008, la U completó cuatro años de estar en la cima del fútbol de esta parte del continente: ganó al CONMEBOL Sudamericana del 2009 y las Recopas Sudamericanas del 2009 y 2010.
El hombre visible de la seguidilla de títulos internacionales fue Don Rodrigo Paz, el presidente vitalicio de Liga de Quito, el club de sus amores. Hace dos años, el 21 de agosto del 2021 falleció y quien quedó al mando del equipo es su hijo, Esteban Paz. La pasión de Don Rodrigo por LDU nació en 1967 y la trasladó a su hijo Esteban, que primero fue mascota del equipo y luego su dirigente.
El título de la Libertadores del 2008
Esteban relató que, en las sesiones de directorio, cuando la mayoría pedía la salida de Edgardo Bauza, Rodrigo Paz se opuso siempre. "Veíamos que el trabajo de Bauza no se visibilizaba en los resultados, y no siempre es así, el trabajo si es bueno, adecuado y sostenido, tarde o temprano va a dar resultado, y eso nos inculcó mi padre. "Si se va Bauza me voy yo", nos dijo mi padre".
Pero Esteban tuvo su posición, que también fue respetada por su padre: "yo me impuse en la contratación de José Francisco Cevallos. Él se oponía porque era un jugador identificado con Barcelona". El arquero se transformó en figura en la consecución del título de la Libertadores.
El plantel de jugadores se mantuvo, en su mayoría, por esos cuatro años, en los que Liga de Quito estuvo en la cumbre del fútbol Sudamericano.
La final entre Liga de Quito y Fortaleza, del próximo sábado, es la primera que afronta Esteban Paz como máximo referente del equipo de fútbol. Ha acompañado al equipo en todos los partidos y ahora quiere escribir su propia historia con el quinto titulo internacional, el primero bajo su mando.