Piojo asegura que su credibilidad no depende de un resultado y que su confianza en la Selección de Costa Rica sigue intacta antes del duelo ante Honduras
El técnico de la Selección de Costa Rica, Miguel Piojo Herrera, habló con claridad sobre el momento que vive el equipo y la presión que lo rodea de cara al juego eliminatorio ante Honduras. Fiel a su estilo frontal, el mexicano aseguró que su valor como entrenador no se mide por un marcador, sino por el trabajo y la credibilidad que ha construido a lo largo de su carrera.
“Ni voy a ser mucho mejor técnico si gano mañana, ni voy a ser peor técnico si no gano. Soy un técnico confiable, por eso me han contratado en varios lugares y sigo con la credibilidad”, expresó Herrera en conferencia de prensa ante consulta de ESPN.
El Piojo insistió en que la eliminatoria no se gana con ansiedad, sino con orden y jerarquía. Por eso, confía en los jugadores experimentados como Keylor Navas, Celso Borges y Kendall Waston, quienes aportan liderazgo dentro y fuera del campo.
“La convocatoria es lo que teníamos planeado. Keylor ya entrenó hoy regularmente con el grupo, Celso está en duda, y estamos esperando el resultado médico”, detalló.
Además, adelantó que la alineación ya está definida:
“Sí, ya tengo lista la alineación. Mañana se darán cuenta”.
Herrera reconoció que el grupo ha cometido errores, pero los defendió de los cuestionamientos mediáticos, principalmente a Creichel Pérez.
“Los muchachos tienen momentos de equivocación, y hoy es difícil equivocarse, cualquier persona puede tomar un video. Entiendo que son jóvenes, fue en un momento de día libre. Él ya cumplió su castigo con el club. Tiene que enfocarse, porque es un jugador con proyección”.
Con tres penales en contra en los últimos partidos, el mexicano defendió la labor del equipo y aseguró que no todo depende de la fortuna.
“El penal que sí fue responsabilidad nuestra fue contra Estados Unidos. En los otros dos, uno no era penal y el otro fue una jugada desafortunada. Pero no podemos seguir dando esas opciones”.
Consciente del momento crítico, Herrera apeló a su experiencia y al trabajo diario.
“Sería muy fácil para mí estar en mi casa. Gracias a Dios tengo la vida resuelta. Pero yo estoy aquí porque creo en este grupo y en lo que podemos lograr. Dependemos de nosotros”.
El técnico cerró con un mensaje contundente sobre su filosofía:
“No pienso en la historia ni en las estadísticas, pienso en el hoy. En trabajar fuerte para sacar el resultado”.
