Fútbol Americano
Jordi Blanco, Corresponsal en Barcelona 2y

Jugadora brasileña denuncia "conductas abusivas" en el Barcelona Femenil, un caso que el club considera cerrado

BARCELONA -- Gio Queiroz, jugadora del Barcelona cedida esta temporada al Levante, publicó una carta abierta al presidente del club azulgrana, Joan Laporta, en la que denunció "conductas abusivas dentro del futbol femenino del Barcelona".

El caso, que se remonta a febrero de 2021, ya fue denunciado por la futbolista a la FIFA, que dictaminó que el club no había cometido ninguna irregularidad, lo que fue corroborado, también en su momento, por la Compliance del propio club.

VERSIÓN DE LA JUGADORA
Queiroz afirmó que la denuncia, con todos los detalles, principales fundamentos y demás pruebas ya ha sido enviada a la junta directiva del club y que los responsables de las conductas abusivas están perfectamente identificados.

La delantera explicó que llegó al club en julio de 2020, con tan solo 17 años, y que fue muy bien recibida por las jugadoras y por el cuerpo técnico y entró en una buena dinámica hasta que recibió la primera convocatoria de la selección brasileña. “A partir de ese momento comencé a recibir un trato distinto desde dentro”, apuntó.

“Primero recibí indicaciones de que jugar con la selección brasileña no sería lo mejor para mi futuro dentro del club. A pesar del desagradable y persistente acoso, no le di mucha importancia y atención al asunto”, continuó.

La delantera, que posee la triple nacionalidad española, estadounidense y brasileña, contó que comenzaron a acorralarla “de una manera abusiva” para que renunciara a defender a la selección de su país con métodos arbitrarios y con el claro objetivo de perjudicar su vida profesional dentro del club.

Queiroz también denunció que en febrero de 2021 fue sometida a un confinamiento ilegal por parte de la jefA de los servicios médicos debido a que ella afirmó que sería un contacto estrecho de un caso positivo de covid.

“Desde el principio, intuía que los verdaderos motivos del confinamiento eran otros. Como la orden de la médica era contraria al protocolo sanitario, contacté directamente con el Departament de Salut de Catalunya y pedí aclaraciones. La respuesta fue clara y contundente. Mi caso no era ni podía ser considerado como contacto estrecho según el protocolo sanitario vigente”, continuó.

“Al cuestionarla, ella respondió: 'Tu caso es distinto. Fui autorizada a hacer un confinamiento especial para ti'. Yo, indignada, aún pregunté: ¿Cómo que especial? Ella evitó el tema y nunca me contestó Al final me encerraron ilegalmente y no pude salir de casa. No podía entrenar ni tener una rutina normal. Estaba devastada. Esa arbitrariedad supuso también no viajar con el equipo a la final de la Copa de la Reina”, manifestó.

Tras cumplir con la cuarentena impuesta, la jugadora, de acuerdo con su versión, recibió la autorización de la FIFA para incorporarse a la selección brasileña en Estados Unidos, con pleno conocimiento del club, y antes de viajar y durante el periodo de concentración se realizó varias pruebas PCR, siempre con resultado negativo.

Queiroz contó que, cuando regresó a Barcelona, le llamaron a una reunión con el director del club en la que fue acusada de haber cometido una grave indisciplina y que, por ello, seria apartada del equipo y sufriría graves consecuencias.

“Me acusaron injustamente de haber incumplido el confinamiento, de haber viajado sin autorización del club y sin el consentimiento de las capitanas del equipo. Intenté demostrar que eso no era cierto. Él estaba inflexible, bastante agresivo y en tono amenazante me dijo: "No te preocupes. Te cuidaremos bien". "Entré en pánico. Temí por mi futuro”, reveló.

Tras esta reunión, Queiroz apuntó que su situación cambió para siempre y estuvo completamente expuesta a momentos humillantes y vergonzosas durante meses. “Estaba claro que buscaba destruir mi reputación, minar mi autoestima, degradar mis condiciones laborales y menospreciar e infravalorar mis condiciones psicológicas”, dijo.

“El hecho de ser menor de edad no parece haber sido un impedimento, un dilema moral para mi agresor. Planificó y llevó a cabo cada una de sus incursiones sin objeción ninguna. Ciertamente actuó con la sensación de impunidad, de que contaba con la protección de su cargo dentro del FC Barcelona”, agregó.

Por último, Queiroz deseó que el Barcelona cumpla con su papel institucional y actúe de manera consecuente y transparente, investigando y denunciando los posibles delitos a las autoridades pertinentes. “También deseo que el club, a través de su presidente, se comprometa a implementar medidas efectivas para combatir el problema evidente y bien documentado del abuso moral, el acoso laboral y la violencia psicológica contra las mujeres”, finalizó.

POSTURA DEL CLUB
En el Barcelona se recibió la noticia "con sorpresa" este martes, relató a ESPN una fuente del club, apuntando a que se entendía el tema cerrado y sin valorar el oportunismo de salir a la luz precisamente en la previa de que el Camp Nou acoja el partido del equipo femenino frente al Real Madrid de la Champions League, con el impacto mediático que ello supone.

De acuerdo con el club, la jugadora, en febrero de 2021, fue confinada en su domicilio por ser contacto estrecho con una persona positiva por Covid, siguiendo las indicaciones sanitarias y bajo prescripción de los servicios médicos del club, debiendo pasar una cuarentena.

Ocurrió que fue convocada por la selección brasileña y a pesar de que desde el Barcelona se comunicó a la CBF la imposibilidad de que Gio viajara a Estados Unidos para sumarse al equipo nacional, ella, por su cuenta y riesgo y contra lo indicado por el Barça, se marchó a Orlando.

En aquel momento Gio Queiroz tenía ficha del filial del Barcelona, aunque entrenaba a menudo con el primer equipo, y en cuanto regresó de la convocatoria de la selección brasileña (que le pagó 25 mil dólares) fue informada que a causa de su indisciplina no volvería a tener relación, de momento, con la primera plantilla.

"Somos muy escrupulosos en todos los casos... El día anterior a jugar un partido en Londres contra el Arsenal Patri Guijarro dio positivo y se quedó diez días confinada en Londres”, refirió la fuente consultada, a modo de ejemplo, de la forma de actuar que tiene el Barcelona. "Lo que está fuera de toda duda es que no fue, como dice, un confinamiento ilegal".

"Denunció a la FIFA y a la Compliance del club y en ambos casos se dio la razón a las actuaciones del Barça por no haber respetado la cuarentena. El caso se cerró... Y ahora nos encontramos con esto. Una barbaridad”, se explicó desde el propio Barça, donde solo hay constancia, por el momento, de esta carta abierta pero no de la existencia de una denuncia ante los juzgados.

Con información de EFE

^ Al Inicio ^