BARCELONA -- El Barcelona trabaja en la confección de la plantilla de la próxima temporada tan centrado en la operación refuerzos, que Xavi quiere aumentar más allá de los fichajes de Andreas Christensen y Franck Kessié, como en las salidas, fundamentales para la dirección deportiva tanto por un aspecto deportivo (futbolistas que no entran en el proyecto de futuro) como económico (necesidad de rebajar la masa salarial).
"Se está trabajando para aumentar el potencial de la plantilla, pero no es fácil", admitió a ESPN Deportes una fuente del club azulgrana, reiterando que tan importante es acertar en las incorporaciones como hacer espacio en el vestuario en el aspecto salarial.
En este sentido existe una relación de nombres, más o menos conocida por el gran público, de futbolistas a los que se quiere dar salida a final de curso. Y en varios de los casos siendo tan importante el teórico ingreso que pudiera existir a través de un traspaso como, casi, el ahorro salarial que su marcha signifique.
LAS ENTRADAS
Dos son los jugadores que se dan por cerrados. Andreas Christensen, a falta de hacerse oficial, reforzará el centro de la defensa y Franck Kessié sumará en el centro del campo. A partir de aquí en el Barça se mantiene necesario otro zaguero, incorporar un lateral zurdo, probablemente un extremo y un delantero diferencial. Son los deseos...
Falta saber si se podrán hacer realidad. César Azpilicueta, cuya situación en el Chelsea no se tiene del todo clara (acaba contrato pero con una cláusula de renovación automática que se desconoce a ciencia cierta si se ha hecho o se puede hacer efectiva), es un nombre marcado de forma especial desde hace varios meses en la direccción deportiva del club.
Es el veterano internacional el número uno de la lista, pudiendo también desempeñarse como lateral derecho, una posición cuya opción de reforzar especificamente se mantiene en el aire a la espera de conocer el futuro de Dani Alves y teniendo en observación también desde hace varios meses al futbolista marroquí Noussair Mazraoui.
Más trascendente es el lateral zurdo, donde se considera la necesidad imperiosa de sumar competencia para Jordi Alba. Desde Grimaldo y hasta Guerreiro, pasando por Tagliafico, Gayá, Pedraza o Javi Galán, no son pocos los nombres con que se trabaja... Entendiendo que no se puede, probablemente, hacer una gran inversión.
En la delantera se rebaja la expectativa con Erling Haaland como fichaje principal, en una posición en la que se ha destacado durante las últimas semanas la opción de Robert Lewandowski y se ha especulado con una amplia lista de nombres en la que han aparecido Salah, Isak, Lukaku, Adeyemi, Gnabry, Darwin Núñez, Lautaro o Werner.
Igualmente se trabaja en el extremo, con Antony, Dani Olmo, Rapinha, o Rashford en el escenario... Si bien en esta posición hay que atender a qué pueda ocurrir con Ousmane Dembélé y, en menor medida, con Adama Traoré, cuya permanencia en el Camp Nou se contempla muy improbable.
Y a todo ello hay que añadir el nombre de Àlex Collado, que en principio regresará de su cesión al Granada, y conocer la decisión del club con Ferran Jutglà y Ez Abde, cuyo rendimiento en el filial, tras pasar la primera mitad de la temporada en el primer equipo, está siendo más que satisfactoria...
LAS SALIDAS
El Barcelona mantiene la esperanza de alcanzar un acuerdo de renovación con Dembéle de la misma manera que no contempla demasiado factible la permanencia de Sergi Roberto, jugador al que se considera prescindible.
Umtiti, Lenglet, Neto, Mingueza y Braithwaite son los nombres señalados de manera principal para dejar el club a fin de curso (ya sea con cesión, la baja o un traspaso a bajo coste), además del más que probable regreso de Adama al Wolverhampton y a la espera de decidir el camino a tomar con Sergiño Dest y Luuk de Jong (siendo más probable la permanencia del primero que del segundo).
Pero hay otros tres casos de necesaria solución. Y no fáciles a simple vista. El primero es el de Philippe Coutinho, cedido a un Aston Villa que tiene una opción de compra por la que el Barça está dispuesto a negociar. Lo que está claro es que el brasileño no entra en los planes de futuro y se le buscará un traspaso lo más alto posible, la cifra ideal serían 40 millones de euros.
Tampoco se cuenta en el proyecto de futuro con Miralem Pjanic, cedido a un Besiktas que no hará efectiva la opción de compra por el mediocentro bosnio y por quien el club azulgrana deberá negociar a la baja un traspaso o una carta de libertad en el peor de los casos, atendiendo a que l restan aún dos temporadas de contrato.
El tercer nombre es el de Francisco, cedido al Wolverhampton... Que tampoco pagará los 30 millones especificados en la opción de compra y cuyo intercambio con Adama se especuló en enero y no se cuenta ahora.