La situación se repite un año después para James Rodríguez. Cambió de club con la Eliminatoria encima y varias semanas sin competir. ¿Qué debe priorizar, Rayo o Colombia?
El mediapunta fichó con Rayo Vallecano hace unos días y empezó los entrenamientos en España. Con mes y medio sin jugar aún le falta forma física. Su último partido fue el 14 de julio en la final de la Copa América ante Argentina en Miami. Son 46 días sin fútbol.
Elegido mejor jugador del torneo, gestionó su salida amable de Sao Paulo. Sus vacaciones se extendieron más mientras concretaba su regreso al fútbol europeo. Lo consiguió sobre la hora aunque con desventaja en lo deportivo pues su nuevo equipo ya tiene tres partidos en la liga.
Recién tuvo trabajos de campo el 27 de agosto. Práctica liviana para empezar la puesta a punto con otra misión urgente a la vista. Colombia jugará la ronda de clasificación al Mundial del 6 al 10 de septiembre. Es el capitán y líder futbolístico. Sin embargo, un viaje largo, más el desgaste del calor de Barranquilla, podrían afectar la adaptación que necesita en España.
Le pasó hace un año en Sao Paulo. El acople al nivel de sus demás compañeros demoró por la convocatoria de Néstor Lorenzo y hubo reclamos de técnico Dorival.
Rayo está noveno con cuatro puntos y manifestó su orgullo por contar con el colombiano. El plan es gestionar con cautela su debut.
“Nos toca esperar a todos, hay que ir poco a poco”, dijo el entrenador Iñigo Pérez. El próximo compromiso será el sábado 31 de agosto contra Espanyol en Barcelona.
La Selección está tercera e invicta en la Eliminatoria con 12 puntos. Visitará al colero Perú en Lima y recibirá al líder Argentina en Barranquilla. Sin apuro en la tabla, podría dejar a James fuera de la convocatoria para que su adaptación física sea más efectiva. Un gesto de buena voluntad que beneficiaría al 10 para el futuro.