BARCELONA -- Yerry Mina, que será el primer futbolista colombiano en jugar oficialmente con el Barcelona, fue proclamado mejor central del campeonato brasileño en 2016 e integrante del once del año en América y aterriza en el Camp Nou sin la fanfarria que rodeó el fichaje de Philippe Coutinho... Pero con el convencimiento pleno de estar preparado para hacer carrera en el Camp Nou.
El 25 de junio de 1964, hace ya 53 años, el Barça disputó un partido amistoso en el estadio de la Cruz Alta frente al Sabadell, que perdió por 4-2 y en el que el entrenador de la época, César Rodríguez, dio la alternativa en la segunda parte a Lauro Mosquera, quien entró en lugar de Balsells. El delantero colombiano había llegado a Barcelona pocos días antes para pasar una prueba en el club... Y esos minutos en Sabadell fueron los únicos que jugó de azulgrana, abandonando la ciudad sin que se supiera más de él.
El hasta ahora central del Palmeiras, conocido en Brasil como ‘El Obelisco’ y por quien el Barça pagará 14.1 millones de dólares en concepto total de traspaso, se convertirá en el décimo futbolista colombiano de la Liga española, siguiendo a Jefferson Lerma (Levante), Jeison Murillo (Valencia), Juanjo Narváez (Betis), Luis Muriel (Sevilla), Daniel Torres (Alavés), Carlos Bacca (Villarreal) y Bernardo Espinosa, Marlos Moreno y Johan Mojica (Girona), lucirá con toda probabilidad el dorsal 24 que liberó al acabar la última temporada Mathieu y se convertirá en el jugador más alto de la plantilla, con una talla de 1.95 metros y superando el 1.91 de Gerard Piqué.
Catapultado al fútbol profesional con el Deportivo Pasto, en enero de 2014 pasó al Independiente de Santa Fe, en el que tuvo una eclosión inmediata, conquistando dos títulos y provocando su traspaso al Palmeiras en 2016, con un precio de 3.4 millones de dólares. Su rendimiento provocó tanto el debut en la selección colombiana como el seguimiento de varios clubes europeos, entre ellos el Barcelona y que, de acuerdo con lo dicho desde el Camp Nou, se convirtió en el destino deseado del propio futbolista.
“Tiene buena salida de balón, mucha calidad, buen juego aéreo y es rápido y potente”, se destaca desde los servicios técnicos del Barça, donde se resta trascendencia a los rumores que apuntan a una falta de disciplina táctica. Sao Paulo, Corinthians o Santos han sufrido en primera persona su buena capacidad goleadora, convertido en el primer zaguero del Palmeiras que le marca a los tres grandes rivales del Estado de Sao Paulo desde que lo hiciera el legendario Luis Pereira, destacando por sus subidas al área rival en lanzamientos de corner o faltas laterales.
Llamado a aprender en los próximos meses los secretos del sistema de fútbol azulgrana a las órdenes de Valverde, Yerry Mina debería, de entrada, convertirse en la cuarta opción del entrenador, por más que llega al Camp Nou decidido a demostrar el acierto de su contratación para ser el primer colombiano en jugar con el Barça, después de aquel amistoso de Mosquera en 1964 y de que, bajo el mando de Luis Enrique, el Barcelona trabajase, sin concretar, el fichaje de Cuadrado.