El domingo 10 de abril de 1988, el delantero mexicano Hugo Sánchez marcó "el mejor gol" de su vida, con la camiseta del Real Madrid, luego de elevarse por los aires y perforar la meta del entonces guardameta del Logroñés, Juan Antonio Pérez, con una chilena calificada como "perfecta" dentro de los libros de historia del futbol tanto español como mundial.
"El gol más bonito del mundo, como lo bautizaron en un libro y ya me puedo morir tranquilo luego de marcar ese gol", señaló Hugo Sánchez en entrevista para ESPN.
Durante el minuto 9 del duelo merengue, correspondiente a la Jornada 32 de la liga española, 'Hugol', dentro del área, miró un centro de Martín Vazquez dirigido al punto penal, tomó impulso de salto con la pierna izquierda, saltó de manera acrobática e impactó de zurda, potente y al ángulo, una pelota que se transformó en el "Señor Gol", a la vez que pañuelos blancos y una ovación de pie por parte del respetable acompañaron la celebración y permearon durante unos minutos luego de la reanudación del juego desde el centro del campo.
"Fue el gol que había soñado anotar desde niño", expresó Hugo Sánchez y relató que el colegiado Juan Brito Arceo se acercó, luego del silbatazo final, y le agradeció por haberle permitido ver el gol más bonito en su carrera.
Igualmente contó que Leo Beenhakker, entrenador del Real Madrid campeón en aquella campaña, señaló que ese gol fue para abrir la champaña y beberse la botella completa.
Por su parte y como era de esperarse, el 'niño de oro' acaparó las portadas de los rotativos españoles al día siguiente. El Diario Marca publicó en su portada "Pichichi Hugo, un gol de Oscar", acompañado de una fotografía del momento exacto del remate, mientras que Mundo Deportivo tituló "Hugo, un gol para recordar".
Dentro de ambos relatos, los diarios resaltaron la particular estética con la que el 'manito' -así llamado por los cronistas- se elevó por los aires para el deleite de los presentes, a pesar de que con anterioridad había marcado con el mismo recurso.
Durante la semana posterior y luego de que la noticia dio la vuelta al mundo, en Can Barça también existieron reacciones, específicamente del entonces guardameta Andoni Zubizarreta.
"Reconozco que fue un gran gol, pero tampoco hay que exagerar. Lo que ocurre es que siempre se da mucho bombo a todas las dianas que consigue el mexicano. Estos mismos goles se los he visto marcar a otros jugadores y no se les ha dado tanta publicidad", expresó en conferencia de prensa.
En el trigésimo aniversario de la anotación, el guardameta canario Juan Antonio Pérez relató que aún lo detienen por la calle para recordarle ese gol y se siente orgulloso, pues fue de antología.
"Aún me siguen recordando ese gol que me metió. Me paran por la calle y yo, siendo honesto, me siento orgulloso de aquella historia, pues fue un golazo. Para mí es el más bonito en la historia del futbol español y es un honor haber participado, aunque fuera como portero en aquél día", expresó para el Diario Marca en España.