No importa el color. La blanca del Real Madrid, la roja del Manchester United o la blanquinegra de la Juventus. La camiseta de Cristiano Ronaldo camina por las calles de Uruguay. Los niños la identifican por su famoso número 7. Pese a ello, el portugués representa todo lo contrario a la cultura futbolística de los uruguayos. Es más, me animaría a decirle que los habitantes de esta tierra se sienten más identificados con Lionel Messi que con Cristiano.
¿Por qué? Porque el argentino es como nosotros. Le pegan, se levanta y juega. Es humilde y silencioso. Cristiano se deja ver en su avión privado o en sus vacaciones arriba de un yate.
Al margen de las personalidades, el portugués que volverá a ser rival de los uruguayos en un Mundial, tuvo varios cruces con jugadores de estas tierras, muchos de ellos recordados…
Acaso el más conocido fue cuando el Rifle Walter Pandiani, hoy técnico de Cerro, lo corrió con intenciones de pegarle. “¡Payaso! Si en mi país hacés esto tenés que pedir cita en el dentista”, le gritó el Rifle mientras sus compañeros del Osasuna intentaba separar. ¿Qué había enojado tanto al Rifle? Que Cristiano Ronaldo le preguntó cuánto ganaba. El incidente sucedió en el marco de un partido entre Osasuna y Real Madrid por LaLiga española en febrero de 2011.
“Ese es un payaso, un salame como dije yo alguna vez, estos dos salames, les dije a él y a Mourinho. Su problema es que es un mal colega. Tuvo líos conmigo por hablar demás. Me preguntó a ver cuánto ganaba. Hubo un encontronazo con otro compañero que mide 1,50 y yo me metí en el medio a dar un par de empujones. Ahí me tiró, 'a ver vos cuánto cobrás'. Después se cruzaron palabras de él, Mourinho y mías durante toda una semana en la que estuvimos como unas vedettes de la tele”, comentó el Rifle en la web Por decir algo.
“Como futbolista es un fenómeno pero le falla un poquito, le falta algún tornillo para hacer las cosas que hacer por su forma de actuar, por sus gestos y tiene que mirar al mejor del mundo a ver si aprende alguna cosita más. Yo le dije que en mi país tras ese tipo de acciones tenía que pedir cita en el dentista”, comentó el Rifle.
La bronca de Pandiani duró años porque cuando en el año 2013 le entregaron la Bota de Oro al portugués, el Rifle disparó en las redes sociales: “Tanto lloraste que te lo dieron. Felicitaciones!!! Pero sos el mejor del momento no del 2013!!”.
EL PATO LO DESPEINÓ
Con anterioridad, el que había tenido un cruce con Ronaldo fue el Pato Marcelo Sosa defendiendo a Peñarol en un amistoso contra Real Madrid.
Resulta que Sosa había prometido que despeinaría a Cristiano en pleno partido.
Corrían seis minutos de juego cuando el Pato se le tiró de atrás al portugués. “A veces hay que bajarlo enseguida. Se fastidió más y esa era la idea”, dijo Sosa en Canal 10.
En determinado momento del juego Ronaldo le entró duro a Emiliano Albín y el Pato se arrimó y cumplió con su promesa, le sacudió el pelo de la frente. “Venía de una discusión por una patada mal intencionada y fui a reclamarle. Y ahí fue cuando lo despeiné. Me tiró un manotazo, pero nada más”, dijo Sosa.
CRUCES CON GODÍN
El capitán de Uruguay, Diego Godín, es otro viejo conocido de Cristiano Ronaldo. En la final de la Supercopa de España de 2014, que jugaron Real Madrid contra Atlético de Madrid, el portugués agredió a Godín.
En una acción de pelota quieta, en la que ambos se estaban tomando, el delantero le pegó una trompada al zaguero uruguayo.
En mayo de 2017 se generó otra polémica por una entrada de Godín contra la estrella del Madrid quien quedó tendido en el campo de juego acusando un golpe en la cabeza.
SUS BUENOS GESTOS
Pero no todo es negativo en Cristiano. Muchos uruguayos recuerdan cuando ayudó a Edinson Cavani a salir del campo de juego en pleno partido del Mundial de Rusia 2018. Su gesto recorrió el mundo.
Años después Cavani se convirtió en compañero de Ronaldo en el Manchester United y declaró en Del Sol FM: “Es un placer (trabajar a su lado) no solamente por el hecho de que sea una estrella de fútbol, sino también por el hecho de ver la forma que tiene para manejar el brillo de esa estrella que él ha forjado en su carrera, y ver día a día la manera que enfrenta cada entrenamiento, es un placer sinceramente”.
“Es uno de los grandes jugadores con los que me ha tocado jugar y que me despierta admiración”, aseguró el uruguayo. El delantero de 34 años enfatizó: “Uno lo disfruta y trata de aprender, seguirlo en cosas que a uno le puede parecer que están perfectas, e intento disfrutarlo en el sentido de que el fútbol a veces te permite juntarte con estrellas pero no te deja disfrutarlas por diferentes motivos. Hoy intento aprender de su manera de enfrentar el fútbol y en lo poco que hemos charlado tenemos algunas cosas parecidas, tal vez no en cuanto a las raíces, pero sí a lo que ha sido la formación de cada uno; tenemos cosas parecidas en eso, en lo futbolístico no porque es una fiera”.
Otro que destacó su bondad fue el juvenil golero de la Juventus, Franco Israel, que entrenaba junto a Cristiano en el primer equipo.
Luces y sombras de una estrella que se vuelve a cruzar en el camino de Uruguay.