Pese a que la historia futbolística de México indica que la Selección Nacional nunca ha tenido a un jugador capaz de llevar “al siguiente nivel” en una Copa del Mundo al equipo, con insistencia se suspira por los que no están, bajo la firme creencia de que su sola presencia cambiaría la suerte del Tricolor.
Ni Hugo Sánchez en sus mejores años con el Real Madrid, ni el Rafa Márquez del glorioso Barcelona, que son los dos mejores jugadores en la historia del país, lograron catapultar a México. ¿Por qué sí lo harían otros?
Son contadas las selecciones en el mundo que han tenido a futbolistas que eran capaces de ganar partidos prácticamente por sí solos. La Argentina de Maradona es el mayor y mejor ejemplo.
Desde hace semanas, el debate en torno al conjunto azteca tiene que ver con el no llamado a Javier Hernández, debido a que el delantero vive un buen arranque de temporada con el LA Galaxy de la MLS.
Y en días recientes, el exfutbolista y ahora comentarista Luis García hizo uno de los análisis más puntuales —y polémicos— sobre el ya gastado tema acerca del veto de Gerardo Martino hacia el máximo goleador de la Selección Mexicana.
“Ahora resulta que Javier Hernández es nuestro Diego Armando Maradona, nuestro Pelé, nuestro Zidane… No, es un centro delantero normalito que ya ha estado en varias Copas del Mundo y que tampoco nos ha hecho llegar al octavo partido (sic).
“Con Hernández, sin Hernández, con Pérez, sin Pérez, estamos en el mismo nivel”, mencionó el dos veces mundialista en el programa ‘Los Protagonistas’
Las palabras de García tuvieron eco principalmente porque echan abajo la ilusión de aficionados y hasta comunicadores, que parecen estar en franca campaña para que el Chicharito reciba el perdón —por la indisciplina que cometió— del ‘Tata’ y lo suban al barco de Qatar 2022.
Es una realidad que si se atendiera estrictamente el aspecto deportivo, Hernández merecería ser convocado para fungir como el suplente de Raúl Jiménez, nada más. Ni ‘salvador’, ni solución. Y tendría que pelear el lugar con Santiago Giménez y Henry Martín. Rogelio Funes Mori ni siquiera debería estar en el Tri, pero es uno de los consentidos de Martino.
García no faltó a la verdad con todo y que los defensores y porristas de Javier lo tacharon de “envidioso”, entre tantos otros adjetivos. Está más que claro que para Martino el tema de un posible llamado está en el archivo muerto, no lo va a considerar y no hace falta mucha intuición para saberlo.
Curioso pero real, con frecuencia se añora al que no está, con todo y que cuando estuvo el resultado básicamente fue el mismo. Y en el caso de México se llama Octavos de Final. No más.