BARCELONA -- Sergi Samper, mediocampista de 24 años que en su día fue considerado como uno de los emblemas de la cantera del Barcelona, jugará en el Vissel Kobe de Japón durante cuatro temporadas, una vez firme el finiquito con el club azulgrana tras llegar a un acuerdo para rescindir el contrato que acababa en el mes de junio.
Perseguido por el infortunio, Samper sufrió su última lesión en el mes de octubre y cuando peleaba su última oportunidad de hacerse con un hueco en el primer equipo azulgrana, una apuesta que resolvió a los 16 años, rechazando cualquier oferta en edad juvenil y que se demostró errónea con el paso del tiempo.
Futbolista de toque exquisito y excelente protagonista en el juego de posición del Barça, Juan Manuel Lillo le sumará a la plantilla del Vissel Kobe, donde se reencontrará con Andrés Iniesta, uno de sus mayores defensores en el Camp Nou para, se supone, dirigir el fútbol del equipo japonés en la temporada que recién comenzó en el país oriental.
Samper, que viajará a Japón este martes, abandona la disciplina de un Barça al que se incorporó a la edad de seis años y en el que fue ascendiendo peldaños con brillantez hasta que en el verano de 2011, en el momento de dar el salto al equipo juvenil, tuvo sobre la mesa una oferta del Arsenal, apadrinada directamente por Arsene Wenger, para sumarse a la cantera del club gunner.
El Arsenal llamó a su puerta, a la de Héctor Bellerín y a la de Jon Toral y mientras estos dos últimos no dudaron en aceptar el reto de buscar su camino profesional en Inglaterra, Samper tampoco dudó: barcelonista de cuna su apuesta, celebrada por el club y apoyada por entrenadores y jugadores del primer equipo, fue permanecer porque su sueño siempre fue triunfar de azulgrana…
SIN CONFIANZA
Siete años y medio después, sin embargo, aquella ilusión ya no existe. Luis Enrique contó con él en cuatro partidos de la temporada 2014-15 y en siete de la siguiente, antes de decidir su cesión al Granada de Paco Jémez al comienzo del curso 2016-17. El despido del entrenador canario, quien apostó decididamente por él para dirigir el juego ofensivo del equipo, le apartó del plano y un año después, en Las Palmas, aún fue peor, por cuanto una grave lesión motivó su regreso antes de tiempo a Barcelona para acabar de recuperarse.
Valverde le abrió la puerta del vestuario pero nunca le ofreció la confianza que Samper esperó en su casa. Solo le dio minutos en un partido de Copa, fatídico, en
León. Allí se lesionó y una vez recuperado, en enero, no volvió a verse en ninguna lista de convocados.
Por fin, entendiendo que no iba a triunfar de azulgrana, Sergi Samper prefirió no acabar su contrato y llamado por el Vissel Kobe acordó rápido la rescisión en el Camp Nou. Y se acabó su historia en el Barça.