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Lionel Messi y LeBron James: dos líderes diferentes, pero de verdad

La palabra líder no les queda grande. Dentro de una cancha, uno con el balón en sus pies y el otro con la pelota en sus manos, son la referencia obligada de sus compañeros para ganar partidos, para resolver con su magia situaciones complicadas y para enseñar a sus compañeros el camino al éxito. De Lionel Messi y de LeBron James estamos hablando.

Sin embargo, no siempre los fanáticos del fútbol o del baloncesto están totalmente de acuerdo con aquella valoración. Acaso porque Lionel Messi no utiliza las palabras para demostrar serlo, sino que prefiere que sus habilitades con el balón hablen por él. Y en el caso de LeBron James, porque a su estilo de ejercer el liderazgo sin mostrar signos de egoísmo, algunos lo consideran una debilidad.

Pero sus respectivos logros, son razones suficientes para acallar las críticas y rendirnos ante la evidencia: Son líderes y punto. Ambos tienen puntos en común y otros en los que se diferencian. En la siguiente conversación, nos enfocamos a descubrir en qué se parecen y en qué no.

Jordi Blanco: Dijo una vez el llorado Kobe Bryant que LeBron James era el Leo Messi de la NBA... La importancia de ambos, resumida, es indiscutible por más que ampliada al escenario general de sus deportes la figura de Leo trascienda mucho más allá por cuanto siempre permaneció en el Barcelona mientras LeBron saltó de Cleveland a Miami y de ahí pasó a Los Ángeles con otra permanencia entre ambos en Ohio... Un detalle que no es menor.

Marcelo Bousquet: Es cierto lo que mencionas, Jordi. No es un detalle menor, pero no creo que ello signifique una ventaja para mi compatriota sobre LeBron. Te explico las razones: James ha sido líder en cualquiera de los equipos que jugó. En Cleveland por dos ocasiones y en Miami también. Aunque en la primera temporada se decía que el Heat era el equipo de Dwyane Wade, los títulos llegaron cuando LeBron cargo con el peso del equipo. Y en esta temporada con los Lakers, venía demostrando, a los 35 años, que si al equipo se lo considera candidato, es por él.

JB: Pero Messi, estimado Marcelo, nació, creció y se hizo leyenda rodeado de los suyos. Es cierto que tuvo la fortuna de que esos compañeros han sido a menudo los mejores por cuanto no es cualquier cosa hablar de Deco o Roaldinho primero y de los Xavi, Iniesta, Piqué, Busquets o Neymar y Suárez después. En el Barcelona se encontró con los socios perfectos, la mayoría crecidos en La Masía y el resto llegados para completar plantillas de excepción con las que conquistar la gloria.

LeBron, en cambio, se catapultó bestialmente en Cleveland pero tuvo que emigrar a Miami para rodearse de unos secundarios de lujo con los que convertir su magnificencia en títulos.

MB: ¿Y eso lo hace menos líder?. No lo creo. Messi también tuvo “secundarios” de lujo en la lista que mencionaste. ¿Qué le pasó a Cleveland cuándo LeBron emigró? Nunca disputaron un juego de playoffs. ¿Y con Miami?. Han sido, desde el 2014, un buen equipo que no siempre pudo llegar a la postemporada. No te olvides que entre el 2011 y el 2017 Lebron disputó 8 finales consecutivas. ¡Él solo fue una dinastía más allá del uniforme que vistiera!

JB: Capaces por si mismos de sentenciar un partido en un momento concreto, Leo atesora récords de toda índole vestido de azulgrana, mientras LeBron ha logrado sus marcas sin tener en cuenta su equipación, aunque ello no reste, en absoluto, ningún mérito a lo conseguido en sus 16 años de carrera, mayúscula, en la NBA.

MB: Me alegro que le reconozcas los méritos al Rey, estimado Jordi. Yo tampoco desprecio en absoluto lo conseguido por Messi. Al contrario: lo valoro muchísimo, pero creo que lo que propones como discusión es como pretender comparar peras con manzanas. Son dos frutas diferentes, aunque deliciosas. Antes nombraste a Kobe Bryant y reconozco que él fue como Leo al vestir un solo uniforme durante su carrera. Magic Johnson y Larry Bird fueron otros, pero te recuerdo que hasta Michael Jordan, Pelé, Cruyff y Maradona vistieron más de una camiseta en sus carreras.

JB: Pocos, muy pocos, son los jugadores capaces en todo el mundo de hacerle sombra a Messi, cuyo mayor mérito, más allá de los títulos y récords personales, puede considerarse el mantenerse en lo más alto del fútbol mundial durante 15 largos años, una circunstancia nunca vista. Pocos, muy pocos, pueden decir lo mismo en la NBA. Y LeBron es uno de ellos.

MB: Totalmente de acuerdo, Jordi. Nada que reprocharte en tu comentario anterior. Son dos cracks.

JB: A Kobe, Marcelo, no le faltaba razón cuando sentaba en la misma mesa a Leo y LeBron porque Kobe, ya lo sabes, era un enamorado del fútbol y habiendo seguido a lo lejos el camino de Messi hacia la eternidad le resultaba familiar el crecimiento de James, mucho más cercano.

MB: Tal cual. Ahora déjame rematar con algo que te va a gustar. Fuera de la cancha, los dos han ganado protagonismo como líderes para convertirse en un espejo de los jóvenes que llegan al profesionalismo queriendo ser estrellas. LeBron siempre utilizó su voz para defender a sus colegas cuando fue necesario. Y Messi le acaba de demostrar al Barcelona que si tiene que hablar y decir sus verdades, no le escapa a su responsibilidad y puede ser tan letal como cuando enfrenta a un portero con pelota dominada. Te pregunto: ¿Son dos líderes de verdad a pesar de sus estilos diferentes?

JB: Sin duda. Dos líderes de verdad.